Hace ya tiempo que Freedonia y el público alavés mantienen una estrecha e idílica relación. Sus dos últimas visitas, eso sí, tuvieron su aquel. En enero de 2020, cuando nada hacía presagiar lo que sucedería poco después, pusieron patas arriba la sala Jimmy Jazz. Cuando regresaron en julio de 2021, aquella vez de la mano de Korterraza, todo había cambiado. Tocó actuar en el Iradier Arena con las consabidas restricciones por el covid. Hoy, por así decirlo, toca volver a la normalidad.
Es el momento de quitarse aquella espinita. Hay que reconocer que por muy buena predisposición que tuvieran espectadores y grupo en el coso, tener que seguir una actuación de este grupo con la obligación de estar sentado y sin tocar a nadie, parece un contrasentido. La música de Freedonia es para disfrutar, bailar, sudar y compartir.
Así ha llegado de volver a tener con la formación un concierto al uso. En el espacio de la calle Coronación, las puertas se abrirán a las 21.30 horas, quedando todavía alguna entrada disponibles. No habrá teloneros, así que toda la atención se centrará desde el primer segundo en el grupo.
Con novedades
En realidad, en el caso de Freedonia, como pasa con otras bandas, no es necesario que haya material nuevo sobre la mesa para disfrutar de su directo. Este proyecto nació para vivirse en concierto, sin que eso signifique menospreciar su trabajo en el estudio. Ni muchos menos.
Con todo, están en la carretera tras haber lanzado un nuevo tema, Cheap Love, una crítica a la nueva forma de entender el amor, las relaciones afectivas y sexuales como si las personas fuesen un producto que forma parte de un catálogo infinito en una web.
Está previsto que este single sea parte del nuevo trabajo de la banda de funk y soul, un proyecto que se extenderá en los próximos meses y que irá desvelando sorpresas en el transcurso de la actual gira.
