El Festival de Cortometrajes de Gijón, Corto Gijón, celebra su novena edición del 4 al 7 de mayo. Por segundo año consecutivo, el certamen presenta la Muestra Conexiones, organizada por la Asociación Cineclub Asturias, con el objetivo de mostrar las miradas surgidas dentro de un espacio geográfico concreto, sin perder la perspectiva global que aporta el cine. Tras una primera entrega dedicada al cine gallego, ahora se pone el foco en los creadores vascos, entre los que se encuentra la artista gasteiztarra Alejandra Bueno.

Arnasa, de Raúl Barreras, seleccionado en Zinebi, lleva la historia sobre las dificultades que atraviesa una familia con la pérdida de un ser querido. Una experiencia universal sobre el duelo, la responsabilidad afectiva y los cuidados, mostrada a través de la vivencia de su protagonista Inaxio, quien tras perder a su mujer, recibe la visita de su nieto Ekaitz.

Por su parte, el realizador Josu Martínez presenta Hitzak, también seleccionado en el Festival Internacional de Cine Documental y Cortometraje de Bilbao, la obra se ambienta en 1966, en un pequeño pueblo de Iparralde, donde cuatro jóvenes encuentran algunos pedazos de papel enterrados en un bosque. Los papeles están escritos, pero los protagonistas no entienden la lengua, el euskera, porque sus familias perdieron la tradición de hablarla tiempo atrás.

En Muga, Eñaut Castagnet presenta las fronteras que han de cruzar los habitantes de un pueblo y las diferencias que entrañan para sus dos protagonistas. Mientras Joxean las traspasa semanalmente con aparente normalidad para vender cerdos, Kamaru siente que la frontera es sinónimo de obstáculos y peligro.

El trabajo de Aitzol Saragatxaga Sáenz en Lanbroa –rodado en localizaciones de Álava como Amurrio– le valió la selección en Abycine y Alcine. Es una historia sobre el aislamiento de un padre y su hija que viven en un bosque inhóspito y el terror que sienten por una misteriosa bruma que emerge entre los árboles y que parece ejercer un efecto devastador sobre el cuerpo y mente de todo ser vivo.

El cortometraje Muskil, de Marina Perosanz, tendrá su estreno en el marco de Corto Gijón. Se ambienta en el contexto rural vasco y trae la historia de una mujer de avanzada edad que necesita salir de su cotidianeidad en la que sufre violencia. Además, Alejandra Bueno presentará Ezohikoak, que versa sobre la idea del matriarcado vasco y plantea cuestiones como el origen del mismo, explorando si es un reflejo real de la sociedad o un anhelo de la misma por esta forma de organización social.