- Tales from the loop es la serie que estrena hoy Amazon Prime Video, una historia de ciencia ficción protagonizada por Rebeca Hall y Jonathan Pryce que gira en torno a una máquina que hace posible lo imposible y que su creador, Nathaniel Halpern, espera que proporcione a la sociedad “un poco de esperanza” en los duros tiempos que corren. “A menudo, en la actualidad, en la ciencia ficción y el entretenimiento en general hay mucha violencia y se abusa de la ansiedad y el miedo y la ira”, explica Halpern, que se ha inspirado en un libro de arte narrativo con el mismo título creado por el sueco Simon Stålenhag. “He querido crear un show con gran cantidad de empatía y con mucha emoción y una cualidad universal que pudiera suministrar un poco de esperanza sin ser sentimental”, aclara el escritor. Halpern ha creado una serie de 9 episodios en la que cuenta diferentes historias relacionadas con una máquina misteriosa denominada Loop, ideada por un científico llamado Russ, que encarna el actor británico Jonathan Pryce.
En Tales from the loop, el enigmático instrumento, custodiado bajo tierra, hace posibles ciertas situaciones que anteriormente quedaban reservadas a la ciencia ficción, como encontrarse durante la niñez con tu yo adulto o convivir unos días con la versión de ti mismo que se ha desarrollado en una realidad paralela. Para la actriz que se mete en la piel del personaje protagonista, Rebeca Hall (Loretta), la serie tiene un carácter único porque es “enigmática y contenida, y misteriosa y fantástica, pero además está anclada en algo familiar. Creo que es refrescante y bastante valiente. Nos pide que nos enfrentemos a preguntas filosóficas importantes sobre lo que significa ser humano de una manera muy sentida, sincera y vulnerable”, opina. Pero la intérprete, hija del director de cine, teatro y ópera Peter Hall, subraya la originalidad no solo del argumento de la serie, que no tiene que verse necesariamente en orden cronológico dado el carácter independiente de la trama de cada capitulo, sino también de su elaborada fotografía y estética. “No creo que nunca haya visto un programa de televisión inspirado en arte. Eso inmediatamente me hizo imaginar que iba a tener una sensibilidad visual muy fuerte, un tipo de estética muy específico y me pareció muy emocionante”, añade. Cuenta, además, que cuando le propusieron el proyecto se lo describieron “como si Ingmar Bergman hiciera ciencia ficción”.