Madrid - Lugares fuera de sitio, de Sergio del Molino, fue galardonada por unanimidad con el Premio Espasa 2018, según el fallo del jurado hecho público ayer, que destacó cómo el autor cuestiona en su obra la “arbitrariedad de cualquier frontera”.
Sergio del Molino recorre en Lugares fuera de sitio pequeños territorios frontera en los confines de España “en busca de razones para la convivencia en un momento en el que a muchos les cuesta encontrarlas”, destacó la editorial Espasa.
Dotado con 30.000 euros, el 35º Premio Espasa fue decidido por un jurado presidido por Pedro García Barreno, y compuesto por Nativel Preciado, Leopoldo Abadía, Fernando Trías de Bes, y Pilar Cortés en representación de la editorial. Un jurado que describió la obra ganadora como “una original combinación de reflexión histórica y vivencia personal que cuestiona la arbitrariedad de cualquier frontera”. Gibraltar, Ceuta, Melilla, Andorra, Olivenza, Llívia o Rihonor de Castilla son algunos de los enclaves por los que transita el autor y en los cuales se resumen y agrandan los conflictos y los dilemas nacionales.
Todos estos lugares fronterizos que analiza Sergio del Molino en la obra ganadora tienen en común su anacronismo, su vocación de lugar molesto que estropea la armonía de los mapas, ha indicado la editorial, que publicará Lugares fuera de sitio el próximo 23 de octubre.
Sergio del Molino (Madrid, 1979) es escritor y periodista. Premio Ojo Crítico y Tigre Juan, entre otros, por La hora violeta (2013), es autor también de las novelas Lo que a nadie le importa (2014) y No habrá más enemigo (2012). Su ensayo La España vacía (2016) se convirtió en un fenómeno editorial y abrió un debate social, cultural y político, además de recibir el Premio de los Libreros de Madrid al Mejor Ensayo y el Premio Cálamo al Libro del Año. Su última novela es La mirada de los peces (2017), con la que finalizó una especie de trilogía sobre la muerte: la primera fue La hora violeta, en la que habló de la muerte de su hijo de leucemia; le siguió Lo que a nadie le importa, sobre la de su abuelo, y en la tercera habló de la de su profesor, Antonio Aramayona. - Efe