GAsteiz - De aquel encuentro, solo se emitió un comunicado firmado por ambos creadores: “Más allá de nuestras diferencias siempre habrá un espacio-tiempo para la paz”. “Pero yo no podía perder detalle de lo que ahí se hablaba. No solo sacaba fotos, intentaba retener en mi memoria todas las conversaciones, era consciente de que se estaba escribiendo historia”, confiesa Ruiz de Azua.
Días más tarde, José Luis Iturrieta recogía parte de aquellas conversaciones.
Pili. (A Oteiza). - ¡Cuánta pérdida de tiempo! Toda la vida he sabido que nos querías.
Oteiza. - ¡Qué hermoso hierro! (por la escultura Besarkada de Chillida).
Chillida. - He vaciado la casa para hacer un homenaje a la estructura que la sostenía. En la iglesia de Santa María de Zumarraga siempre me impresionó el espacio. -Y volviendo al tema que allí les había reunido-. Hay veces que se dicen cosas y que luego se distorsionan. Por eso estoy encantado de que hayas venido.
Oteiza. - ¡Qué fuerte estás!
Chillida. - También soy mucho más joven que tú, dentro de poco voy a cumplir 74 años.
Oteiza, bromea con sus casi 90.
Chillida. - Los llevas muy bien, tu cabeza está fenomenal. Con Itziar -su mujer- perdiste algo muy importante.
Camino de la escultura siguen hablando de arte. Ya junto a ella...
Chillida. - Las vigas de acero, tremendas, las he atado en caliente, es muy sencilla de concepto, es enteramente maciza. Aquí se ve que es de verdad, es enteramente maciza.
Oteiza juguetea con la txapela. Se ve venir el abrazo.
Chillida. - Pili que esté aquí también. Me alegro mucho, estaba esperando esto hace muchos años, es un día grande para mí. Se ha querido utilizar todo esto, pero está olvidado.
Oteiza. - Ahora estamos dando un ejemplo que debe seguir el país.
Chillida. - Los políticos deben pensar un poco.
Oteiza. - Puede servir como ejemplo. Que luchamos, que nos queremos. Esto es país.
Tras el abrazo, pasan al caserío y siguen hablando de exposiciones, de la que tenía Chillida en Holanda.
Oteiza. - Qué bonito es todo esto, qué bien están situados los espacios.
Chillida. - He querido hacer un homenaje al espacio con esta casa, y a nuestra arquitectura popular, y a este país y a lo que son las iglesias de este país...
Oteiza. - ¡Cómo se impone el espacio!
Chillida. - El que manda es el espacio.
Suben las escaleras para observar desde arriba. Jorge le recuerda que es del mismo año que Nestor Basterretxea y Chillida que tiene 8 hijos y 23 nietos. Y le echa una flor: “Esto es un homenaje al espacio. ¡Qué pronto lo has visto!”.