MADRID. Según publica este medio y recoge Europa Press, Watson compró la propiedad en 2013 a través de Falling Leaves, una empresa con sede en las Islas Vírgenes Británicas.

Un portavoz de la actriz ha señalado que Watson estableció una empresa offshore con el objetivo de proteger "su anonimato y seguridad personal" y ha indicado que con ella no recibió ningún impuesto o ventaja financiera.

Tal y como señaló a la revista 'The Spectator', la intérprete estableció una sociedad offshore con "el único propósito de proteger su anonimato", puesto que, según sostiene, su seguridad "se ha puesto en peligro en el pasado" debido a la información que se requiere al establecer una sociedad en Reino Unido y que ha estado a disposición del público.

"Las sociedades offshore no publican estos detalles de los accionistas. Emma recibe absolutamente ningún impuesto o ventajas económicas de esta empresa offshore en absoluto, sólo privacidad", ha recalcado.