DUBLÍN. La artista, de 44 años, también agredió a una de las azafatas del vuelo que cubría el trayecto entre Nueva York (EEUU) y el aeropuerto de Shannon, al oeste de Irlanda, el 10 de noviembre de 2014.
En una vista celebrada hoy en un tribunal de Ennis, en el condado de Clare (oeste), el juez Patrick Durcan optó por imponer una sanción económica en lugar de una "condena penal", que hubiese conllevado un castigo más severo.
"En mi opinión, no procedía y no hubiese sido justo criminalizar a la acusada por este caso", dijo Durcan, quien recordó que O'Riordan no tiene antecedentes penales y, como muestra de su arrepentimiento, ha pedido perdón por escrito a todos los afectados por sus actos.
Según ordenó el juez, la cantante deberá donar el dinero de la multa a una asociación dedicada a la reinserción social de presos.
"Quiero dejar muy claro que no se ha tratado a la acusada de la misma manera que a cualquier otra persona", recalcó el magistrado.
O'Riordan se declaró el pasado diciembre ante este mismo tribunal culpable de cuatro delitos, entre ellos el de agresión y obstrucción de los agentes de la Policía irlandesa (Garda) que la detuvieron después del aterrizaje del avión de la aerolínea irlandesa Aer Lingus en el que viajaba.
Durante su detención, O'Riordan, quien padece trastorno bipolar, insultó a los agentes y les recordó que es un "icono mundial" y "la reina de Limerick", la ciudad del suroeste de Irlanda donde nació el 6 de septiembre de 1971.
Asimismo, acusó a uno de los policías en el momento del arresto de manosearla y agredirla sexualmente, una afirmación que retiró después durante el juicio.
El abogado defensor de O'Riordan presentó durante el juicio varios informes médicos que aseguraban que por aquella época sufría episodios de "hipomanía", "privación del sueño" y "paranoia".
Asimismo, explicó que la artista, quien reside actualmente en Nueva York y es madre de tres hijos de 10, 14 y 18 años, se separó de su marido, Don Burton, pocos meses antes del citado suceso.
The Cranberries, con la carismática Dolores a la cabeza, saltó al estrellato internacional a principios de los noventa con temas como "Zombie", "Dreams" o "Linger", y ha llegado a vender más de 40 millones de discos en todo el mundo.
Tras disolverse en 2002, la banda de rock irlandesa volvió a juntarse siete años después para iniciar una gira mundial de un año y en 2012 sacaron al mercado su último álbum, "Roses".