A muchos les siguen pareciendo una horterada, pero las joyas con formas de animales siguen teniendo su legión de seguidores. Para ellas no existe el menos es más, y entran triunfantes en el 2014 como símbolo de ostentación y? de poderío, porque siguen siendo carísimas.
Y es que hay todo un zoológico detrás del mundo de las joyas, que desde hace muchos años se mantienen hasta la actualidad como toda una tendencia ganadora. Son conocidas como joyas animales o zoo joyas en varias partes del mundo y muchas marcas reconocidas han creado una serie de colecciones para esta temporada que son para morirse. Desde las más minimalistas hasta las más elaboradas, cada una con el sello que las caracteriza.
Puede que aliñar cualquier tipo de estilismo con una joya de este tipo parezca una opción de lo más moderna, pero en el fondo se trata de recurrir a uno de los adornos más antiguos. De hecho los hombres, desde hace millones de años, han tratado de llamar la atención de diferentes formas, y una de ellas era utilizando algunos fósiles de animales que cortaban, pintaban y modificaban, hasta convertirlos en algún tipo de colgante con un significado especial para ellos. En general, el simbolismo siempre ha sido una parte fundamental para los hombres que utilizaban, como inspiración, a los fenómenos naturales, animales y vegetales.
Esa inspiración ha llegado hasta hoy en día, y especialmente memorables son las joyas de la firma Cartier, que ha conseguido hacer de las carísimas alhajas con forma de animales una verdadera marca de la casa. Desde sus orígenes, pero sobre todo desde los años 1940, bajo la influencia de Jeanne Toussaint, en el universo de Cartier abundan los animales, tanto reales como fantásticos. El joyero encuentra inspiración en los animales salvajes de África, en particular las fieras; también en los animales sagrados del antiguo Egipto; y en los perros de Fu, los dragones y las quimeras de la China.