madrid. Si la noche del 9 de febrero la lucha fuera puramente numérica, la gran pelea de la jornada en los premios del cine español correría en esta edición a cargo La gran familia española, de Daniel Sánchez Arévalo, y Las brujas de Zugarramurdi, de Álex de la Iglesia, con once y diez candidaturas respectivamente. Pero los caprichos de los académicos españoles apuntan a que con toda probabilidad habrá otros duelos en la gala de los Goya porque, en la nómina de aspirantes al cabezón, el bilbaíno se ha quedado fuera de dos de las principales categorías, la de mejor director y mejor película, donde sí competirá Sánchez Arévalo.

Este fue uno de los detalles más comentados ayer durante la ceremonia de presentación de las candidaturas a los Goya, a cargo de los actores Clara Lago y Quim Gutiérrez. Los académicos parecen este año inclinados por la comedia y han otorgado a La gran familia española once categorías, entre ellas, las ya mencionadas de mejor película y director, así como la de mejor guión original y tres nominaciones para su reparto. "Vengo de México y yo, que no soy nada religioso, fui a pedírselo a la Virgen de Guadalupe, le estoy muy agradecido", decía Sánchez Arévalo, exultante, a quien pilló la noticia "de la mejor manera: escribiendo". "Mi esperanza sería que las nominaciones sirvan para que vuelva a las ciudades donde ha estado y a gente que no ha podido llegar a ella", señaló el director, para quien, a pesar de que la industria del cine pasa por dificultades, su principal objetivo debe seguir siendo trabajar para seducir al público.

Le sigue en número de nominaciones Las brujas de Zugarramurdi.. Pero pese a sumar diez nominaciones, ninguna de ellas reconoce la cinta en las grandes categorías, aún cuando este año las candidaturas aumentaron a cinco el número de películas susceptibles de ser coronadas entre las mejores del año. Las cintas que acompañarán a La gran familia española en la lucha por el Goya a la mejor película son 15 años y un día, de Gracia Querejeta; Caníbal, de Manuel Martín Cuenca; Vivir es fácil con los ojos cerrados, de David Trueba, y La herida, de Fernando Franco.

de la torre Martín Cuenca, que ha conseguido ocho nominaciones por Caníbal, no estuvo presente en la sede de la Academia ayer, como tampoco su actor protagonista, Antonio de la Torre -doblemente nominado, por esta película, y como secundario por La gran familia española- y su protagonista. Sánchez Arévalo bromeó con el hecho de que De la Torre suele ser nominado muchas veces pero al final "se queda sin ninguno", como le ocurrió el año pasado. Por el momento su único Goya lo recibió en 2007 como actor de reparto por AzulOscuroCasiNegro, la ópera prima de Sánchez Arévalo y por el que consiguió el galardón a la mejor dirección novel.

Por su parte, David Trueba, que se enteró de su nominación como mejor director cuando estaba en una librería madrileña, celebró en la sala de la Academia de Cine donde se leyeron las nominaciones, el empujón que estas candidaturas darán a Vivir es fácil con los ojos cerrados, y, probablemente, una reposición en las salas. El protagonista de esta película, Javier Cámara, optará por este trabajo a su primer Goya tras cinco nominaciones, en una categoría en la que se enfrentará a Antonio de la Torre, al veterano Tito Valverde y su estricto abuelo en 15 años y un día y a otro habitual de la fiesta del cine, Eduard Fernández. El catalán, siete veces nominado y dos veces ganador, encara con muchas posibilidades este tercer Goya gracias a su acorralado macho man de Todas las mujeres.

Gracia Querejeta, con siete nominaciones, celebró que los académicos se acordasen de su cinta "estrenada a primeros de junio" y confió en que "a la tercera" vaya la vencida, puesto que aún no tiene un Goya por un largometraje (ganó el primero en 1991 por el corto El viaje del agua), y sí varias nominaciones por Siete mesas de billar francés. La directora destacó los diferentes presupuestos, temáticas y tipos de públicos a los que se dirigen las películas nominadas.

En categoría femenina las nominadas son Inma Cuesta por Tres bodas de más, Nora Navas por Todos queremos lo mejor para ella, Aura Garrido por Stockholm, y por La herida, Marián Álvarez, que ya consiguió la Concha de Plata del Zinemaldia donostiarra por este papel.

En las categorías de secundarios, los nominados masculinos son Carlos Bardem por Alacrán enamorado, Juan Diego Botto por Ismael y Antonio de la Torre y Roberto Álamo por La gran familia española. Y las mejores actuaciones femeninas de reparto son las de Susi Sánchez, por 10.000 noches en ninguna parte, Maribel Verdú por 15 años y un día, Terele Pávez por Las brujas de Zugarramurdi y Nathalie Poza por Todas las mujeres.

A la mejor dirección novel están nominados Fernando Franco por La herida, Neus Ballús por La plaga, Jorge Dorado por Mindscape y Rodrigo Sorogoyen por Stockholm. Entre los mejores documentales se eligió para competir por el Goya Guadalquivir, Con la pata quebrada, Las maestras de la República y Mon Petit, y de los cortos de ficción han pasado la criba Abstenerse agencias, De noche y de pronto, El paraguas de colores, Lucas y Pipas.

Del cine europeo se ha seleccionado Amour, de Michael Haneke; La vie d'Adele de Abdellatif Kechiche, La caza de Thomas Vintenberg, y La gran belleza de Paolo Sorrentino. Emilio Aragón ha conseguido dos nominaciones para su A night in Old Mexico, ambas por la música. Y en la categoría de mejor película iberoamericana, las candidatas son Azul y no tan rosa del venezolano Miguel Ferrari, El médico alemán de la argentina Lucía Puenzo, Gloria del chileno Sebastián Lelio y La Jaula de Oro del hispano-mexicano Diego López Quemada. Los premios se entregarán el domingo 9 de febrero en la tradicional gala, que presentará Manel Fuentes.