Londres. Si la prensa del corazón británica pudiera pedir un deseo, lo tendría claro: que el príncipe Harry y Cressida Bonas se prometan. Cada vez que se ve al príncipe acompañado por su novia, una bailarina con la que supuestamente sale desde hace un año, se habla de planes de boda. Es imposible saber cuánto de rumores y especulaciones hay en esas informaciones. Y la Casa Real calla.

La última noticia apunta a que la joven de 24 años y el príncipe, de 29, habrían disfrutado junto a otros amigos del fin de semana pasado en la residencia de campo de la reina Isabel II, en Sandringham. "Bienvenida a la empresa", titulaba el diario sensacionalista Sun. "Cressie ha recibido el sello real de Aprobado", citó el periódico a una supuesta fuente bien informada, según la cual Harry iría muy en serio con ella. Pero no está claro si fue la primera vez que Cressida pasaba por Sandringham. Y la reina ni siquiera estaba allí. Además, Harry y su hermano Guillermo invitan a menudo a amigos a la residencia de campo real.

Pero ya no hay tregua para Harry y Cressida. Noticias como esas corren cada vez más como la pólvora, como cuando hace pocas semanas la pareja acudió una noche a un concierto de James Blunt y la siguiente a una obra de teatro en Londres. Lo que está claro es que Cressida no es sólo un pasatiempo para Harry, cuarto en la línea de sucesión al trono y conocido juerguista. Y si bien todavía no la ha llevado a ningún acto oficial, tampoco la esconde. Antes que con Cressida, Harry mantuvo una corta relación con una modelo de ropa interior, de la que poco se supo. Harry sólo se mostró tan abierto con Chelsy Davy, que fue su novia durante casi seis años, hasta 2010. También parece bastante claro que la reina Isabel no quiere que se repita la historia del malogrado matrimonio entre su hijo Carlos y la princesa Diana. El segundo matrimonio de Carlos con Camilla, pero sobre todo la relación ejemplar de Guillermo con Catalina, simbolizan el futuro de la monarquía.

Aristócrata En realidad, es poco lo que se sabe de Cressida. Cressie, como la llaman sus amigos, procede de una familia aristocrática y adinerada. Su abuelo por parte de madre, Earl Howe, fue el padrino del rey Eduardo VII. Y su padre, Jeffrey Bonas, es un millonario hombre de negocios. Al parecer fue la princesa Eugenia, prima de Harry, quien les presentó. Su relación habría empezado a ser más cercana desde comienzos de 2012, pero tras el escándalo de las fotos desnudo, Cressida se habría alejado de él durante un tiempo. Después fueron fotografiados juntos por primera vez a principios de este año esquiando en Suiza. Cressida estudió baile en la Universidad Leeds y terminó este año su formación en el Conservatorio Trinity Laban de Música y Danza de Londres. Igual que a Harry, también le gusta salir de fiesta, aunque parece que no tan demasiado como a él.