bruselas.La familia real holandesa despidió el pasado viernes al fallecido príncipe Friso en una íntima ceremonia celebrada en la localidad de Lage Vuursche, donde sus restos reposarán cerca del palacio en el que creció y al que se retirará su madre, la princesa Beatriz. El hermano pequeño del rey de Holanda fue enterrado en el cementerio de una pequeña iglesia situada junto al castillo de Drakensteyn, en un acto reservado sólo a los familiares y a un reducido círculo de amigos. En total, se calcula que unas cien personas han estado invitadas al funeral, entre ellas el rey Harald V de Noruega, que era padrino de Friso. La despedida no fue un funeral de Estado, dado que Friso renunció a sus derechos dinásticos para casarse por con la princesa Mabel, un enlace que no contaba con el visto bueno del Parlamento nacional.