madrid. El exportavoz del Gobierno de José María Aznar, Miguel Ángel Rodríguez, negó ayer que cuadripulicara la tasa de alcoholemia cuando colisionó con tres vehículos el pasado 3 de mayo en Madrid y aseguró que "a partir de ahora" hará "todo lo posible para concienciar a la gente de que eso no se puede hacer bajo ningún concepto". Así se expresó el ahora tertuliano tras declarar en un juicio rápido por un posible delito contra la seguridad vial que habría cometido cuando se vio implicado en un accidente en el que colisionó con tres vehículos y se sometió a un test que indicó que superaba con creces la tasa de alcoholemia permitida.
"Yo no sabía que tenía personalmente tanta relevancia social, hace 17 años fui nombrado portavoz del Gobierno y hace 14 años dejé la política. Tengo que pedir perdón a la sociedad, he hecho una irresponsabilidad y además haré todo lo posible a partir de ahora para concienciar a la gente de que eso no se puede hacer bajo ningún concepto", aseveró ante los medios de comunicación. Al ser preguntado si cuadriplicó la tasa de alcoholemia permitida al volante, respondió que "ese dato no es así" e indicó que desde el primer momento pidió a su aseguradora que reuniera los teléfonos de los afectados por el accidente. Aunque no ha sido posible, añadió que su compañía se ha hecho cargo desde el primer día de todos los daños que puedan tener los vehículos afectados. "En principio, los daños están en 1.750 euros, quiero decir que rocé los coches, pero aunque sean más, desde luego que se van a pagar todos los daños que tengan los afectados", señaló, para precisar que aún no hay sentencia.
El juicio rápido contra el periodista se celebró a puerta cerrada después de que el titular del Juzgado de Instrucción número 18 de Madrid, Ángel Lera, impidiera la entrada del público y de los informadores presentes para cubrir la vista. Un secretario judicial advirtió a los periodistas de que "los juicios rápidos no son vistas públicas" y el propio magistrado poco después insistió en que se trataba de una vista a puerta cerrada, sin motivar las razones que aconsejan esta decisión y conminando a los periodistas a no acceder a la sala.
Fuentes jurídicas informaron de que algunos jueces entienden que la fase del juicio rápido es parte de la instrucción y, por lo tanto, puede celebrarse a puerta cerrada. En todo caso, se desconocen los motivos por los que no se celebró en audiencia pública.
Los hechos se remontan al 3 de mayo cuando Miguel Ángel Rodríguez se vio implicado en un accidente en el que colisionaron tres vehículos en el distrito de Retiro de Madrid. Tras el siniestro, la Policía Municipal sometió a Rodríguez al test de alcoholemia y se observó un resultado que superaba con creces el permitida. El ahora tertuliano televisivo fue trasladado a la Unidad de Tráfico de la Policía Municipal de Madrid acusado de un delito contra la seguridad vial.