LONDRES. Semaan, de 38 años, y Elie Taktouk se divorciaron el pasado año y, como parte del acuerdo, el juez dictaminó que se debía vender un lujoso piso que compartían en Londres, valorado en 7 millones de libras (8,3 millones de euros), según el diario británico.
De los beneficios, 1,4 millones de libras (1,7 millones de euros) debían ir a parar a manos de Semaan para que pudiera comprarse una nueva propiedad, ya que ella vive habitualmente en la capital británica, si bien visita Barcelona con frecuencia.
Según "The Times", Taktouk alegó en un tribunal que Fàbregas, de 25 años, no sólo se hace cargo de Semaan cuando ella visita la capital catalana, sino que también financia su vida en Inglaterra.
La libanesa es madre de dos hijos con su exmarido y hace dos semanas dio a luz a su primera hija con Fàbregas.
El asunto parecía zanjado cuando una compañía controlada por el jugador catalán hizo una oferta por el piso en disputa de 5,4 millones de libras (6,4 millones de euros), indica el periódico británico.
Taktouk interpuso entonces un recurso ante la Corte de Apelaciones de Londres al considerar que eso era parte de un plan destinado a que su exmujer se quedara con el piso mientras se embolsaba un beneficio millonario adicional.
El abogado defensor de Taktouk, Stephen Lyon, argumentó ayer ante la Corte que el juez habría dictado otro veredicto si hubiera sabido los planes del exjugador del Arsenal y actual centrocampista del Barcelona, señaló "The Times".
"Parece bastante extraordinario que, menos de tres semanas después de la sentencia, (Fàbregas) estaba ofreciendo comprar el piso a través de esta empresa", dijo el letrado en declaraciones recogidas por el diario.
Ante el tribunal, Semaan se defendió diciendo que, si bien se puede garantizar que Fàbregas cuidará de el hijo que ambos tienen en común, no se puede asegurar que esté dispuesto a mantenerla económicamente a ella a largo plazo.
El juez de la Corte de Apelaciones se mostró ayer de acuerdo con la libanesa y desestimó el recurso de Taktouk ya que "aunque la compañía que controla el señor Fàbregas comprase la antigua vivienda matrimonial, ésta no sería ya propiedad de la esposa".
"Ella sólo vivirá allí con el permiso del señor Fábregas", zanjó el juez, según el diario británico.
No obstante, Taktouk presentó otro recurso para bloquear la venta del piso que se analizará en otra sesión judicial dentro de unas semanas.