La difícil situación de las galerías de arte ha obligado a la feria Art Madrid a redefinirse, cambiando de emplazamiento y reduciendo el número de participantes. La muestra, que se celebra hasta el 17 de febrero, se ha trasladado desde la Casa de Campo a la nave del ático de la estación de Chamartín, lo que ha supuesto una reducción del espacio, pasando de 53 a 40 galerías.