DONOSTIA. En un comunicado, fuentes de la Fundación Balenciaga han destacado que este depósito institucional, compuesto por piezas de los años cuarenta, cincuenta y sesenta, supone "una importante mejora cuantitativa y cualitativa" para la colección que alberga el centro, con más de 1.300 piezas recibidas mediante cesiones, donaciones y depósitos institucionales o privados.

De este modo, el museo suma ochenta y dos obras del modisto pertenecientes a la compilación que acumula el Ejecutivo vasco desde finales de la década de los ochenta.

Esta colección, cedida al Gobierno vasco en el año 1988 por Ramón Esparza, colaborador de Balenciaga, es representativa de los años cuarenta, cincuenta y sesenta.

La recopilación incluye diez abrigos, una treintena de conjuntos de día, cinco vestidos de cóctel, una decena de vestidos de noche, nueve blusas, cuatro chaquetas y otras piezas como boleros o capas que descansan estos días en los almacenes del museo.

El depósito es una representación heterogénea de la obra de Cristóbal Balenciaga compuesta por modelos originales, en su gran mayoría, que se exhibirán de manera rotatoria dentro de la muestra permanente del museo. Las estrictas condiciones de prevención y conservación de estas prendas hace necesaria la rotación controlada de las mismas.