No ha pasado ni una, ni dos, ni tres, sino más veces en las últimas semanas. El comentario, expresado de una manera u otra, llega desde distintas instituciones a través de conversaciones informales que se mantienen incluso con periodistas, por así decirlo, no afines. En resumidas cuentas, el mensaje que se está trasmitiendo a los agentes culturales en estas charlas privadas mantenidas desde principios de junio es claro: en tus previsiones para 2013 no cuentes ni por asomo con el mismo dinero de este año. Será por aquello de que el que avisa no es traidor, pero éste es un mantra que se ha podido escuchar ya y eso que, en algún caso, los presupuestos de 2012 se aprobaron o prorrogaron hace nada.
No hay dinero. Son las tres palabras de moda. La última ocasión en que fueron pronunciadas: en la jornada de clausura del Festival de Jazz de Gasteiz. En esa ocasión llegaron desde la Diputación. Pero no es la única institución, ni mucho menos, que está trasmitiendo lo mismo. Es más, representantes municipales reconocieron a este periódico durante la celebración del Azkena Rock que el ajuste realizado en 2012 iba a tener continuidad el próximo año "sabiendo que si la cosa empeora en los próximos meses... Imagina".
Así que en el sector alavés ya hay quien está haciéndose a la idea de que a las consecuencias que tendrán medidas como la subida del IVA, tendrá que sumarse una nueva reducción parcial o total de las ayudas públicas que puede que haya recibido este año (también recortadas), una situación límite que habrá que ver qué más se lleva por delante.
Sin embargo, no parece que esa situación esté generando algún movimiento en contra. Protestas como las iniciadas en febrero por el colectivo ciudadano La Ardilla Ilustrada han desaparecido del mapa, igual que otros posicionamientos críticos llegados desde distintos campos. Lo único y más reciente es un comunicado de la asociación vasca de salas privadas de música en directo Kultura Live poniendo en tela de juicio la medida del IVA, así como una rueda de prensa ofrecida el pasado martes en Bilbao por varios colectivos vascos afectados por lo mismo. De todas formas, da la sensación de que los únicos movimientos se están centrando en la publicación de manifiestos y poco más.
Es esa aparente resignación la red para los anuncios que se están realizando por parte de los responsables políticos sobre los nuevos recortes presupuestarios en las Cuentas de 2013, unos números que se pondrán negro sobre blanco en otoño para ser anunciados y pasar el control de los partidos pero que es ahora cuando se están empezando a configurar.