Bob Dylan "expondrá" sus canciones históricas en la explanada del Guggenheim

Las noticias más cercanas que había ofrecido Dylan este año 2012 tenían que ver con su interpretación en directo en un homenaje al cineasta Martin Scorsese y el lanzamiento de un cuádraple disco editado por Amnistía Internacional con versiones del estadounidense realizadas por músicos tan diversos como Adele, Sting, Patti Smith, Elvis Costello, My Chemical Romance, Maroon 5, Joan Baez, Pete Townshend o Kesha. Pero Dylan dejaría de ser él si no se lanzara a la carretera de nuevo. A su ya conocida gira actual, que visita Latinoamérica estos días y que recalará también en el FIB de Benicàssim, se le unió ayer la confirmación de su concierto en Bilbao el 11 de julio.

Dylan, junto a su banda, actuará en la explanada del Guggenheim la víspera de la jornada inaugural de la séptima edición del Bilbao BBK Live, festival para el que están ya confirmados artistas como The Cure, Snow Patrol, Keane, Bloc Party, Radiohead y James Murphy, entre otros. La actuación coincidirá con el decimoquinto aniversario del museo, según la promotora vasca Last Tour International (también responsable del Azkena Rock), que anunció que las entradas se pondrán a la venta el día 16 de mayo con precios de 45 euros más gastos para las localidades de pista y de 85 más gastos para las poco más de 500 localidades de grada. En total podrán seguir la actuación en torno a unas 5.000 personas, es decir, aquellas que consigan sus pases a través de los cajeros multiservicio BBK, el 944 310 310, www.bbk.es, la red Ticketmaster (www.ticketmaster.es, 902 15 00 25, Halcón Viajes, FNAC y Carrefour), la red Servicaixa (www.servicaixa.com, 902 33 22 11, terminales ServiCaixa) y la red El Corte Inglés.

"La actuación de Dylan en un enclave digno de su grandeza será uno de los muchos conciertos que se organizarán la semana del Bilbao BBK Live, que tendrá lugar entre el 9 y el 14 de julio. Los recitales se celebrarán en diferentes espacios de la capital vizcaína. Continuaremos informando sobre ellos", apostillaron desde la organización de ambas citas.

A pesar de sus 70 años de edad, Robert Zimmerman sigue fiel a la cita que realiza cada año saliendo de gira. En todas ellas ofrece siempre un repaso por su cancionero, siempre de forma huraña y con versiones difícilmente reconocibles de sus éxitos. "Creo que el escenario es su vida, y que fuera del escenario está el desierto", dijo sobre este artista uno de sus más fieles admiradores, Joaquín Sabina, en el documental que realizó Fernando Merinero sobre el músico estadounidense. En él, bajo el título de Las huellas de Dylan, participan cineastas, pintores, promotores de conciertos, literatos y músicos.

"Es el poeta de la canción", dicen los Pereza, recordando su papel (quizás el más importante de la música popular, junto a Lou Reed) al acercar la música popular a la magia evocadora de la poesía. "Era punk rock puro, cantaba como le daba la gana sin importarle una mierda nada", asegura por su parte Loquillo en el documental. Como "una cabra morfinómana", así es como define su voz Moncho Alpuente. Y a pesar de ello y de sus desplantes, tanto al público como a sus músicos, cada visita a Euskadi -con dos citas en Gasteiz- resultan obligadas para sus seguidores.

Dylan, leyenda viva de la música contemporánea desde que irrumpió en el circuito folk en los 60, se electrificó y con el paso de los años, los premios y las decenas de discos que ha publicado ha ido saltando, según sus deseos y ajeno a las modas, del rock al blues, el folk, el country o el gospel. La trilogía que ha publicado en la última década y media, conformada por los discos Time out of mind, Love and theft y Modern times, le ha mostrado en una forma envidiable. En sus últimos conciertos, llevados a cabo en países como Argentina y México, Dylan alterna canciones de estos últimos trabajos con otros clásicos de su carrera como Desolation road, Ballad of a thin man y Blowin´ in the wind.