Araia. Prosigue el Fin de Año Musical de Araia. Tras el riguroso clasicismo del cuarteto Lefèvre, llega hoy un grupo donde se mezclan sonidos de instrumentos tradicionales con timbres clásicos como son la viola y el fagot. El repertorio de esta formación inusual se basa en melodías de raíz tradicional y folk. Los diferentes arreglos cuentan con la sólida base de teclado, bajo y percusión. Su nombre es Folk On y está formado por músicos de diversas procedencias, pero la mayor parte de ellos están unidos por su participación en la Academia Municipal de Folklore de Gasteiz, de la que es responsable técnico el txistulari Roberto Álvarez Leza. La actuación será en Andra Mari Aretoa a partir de las 20.15 horas.
Componen la agrupación Roberto Álvarez Leza (quien toca el txistu, la txirula y el ttun-ttun), Errando López de Luzuriaga (trikitixa), Ainhoa Marauri (viola), Elena Romo (fagot), Itziar Ruiz de Oña (piano), Iñaki Alarcia (percusión y teclados), y Eneko Espino (bajo).
Leza es conocido como txistulari y por su trabajo en la Academia de Folklore. Realizó, junto a Juanma Sáez (también profesor del mismo centro), los arreglos para el memorable concierto celebrado en abril de este año para conmemorar el 25 aniversario del actual edificio del Conservatorio Jesús Guridi.
El acordeonista López de Luzuriaga también es profesor de la academia, mientras que Ainhoa Marauri imparte clases de viola en la Escuela Municipal de Música Luis Aranburu de Gasteiz.
Romo, que toca el fagot y la trompa, forma parte de la Banda Municipal de Música de Vitoria y del Quinteto Indalo. Ruiz de Oña toca el piano pero también forma parte de la Banda de Txistularis de Gasteiz tocando el silbote. Alarcia ha estudiado percusión en Mondragón, Donostia y Barcelona, donde se licenció en percusión moderna. En la actualidad es componente de los grupos Boreas Cámara, Banateuanba, y de Martín y la Barquichuela. Espino es bajista y txistulari, integrante de la Gasteiz Big Band y profesor de la Escuela de Música Luis Aramburu, el año 2008 dio clases de txistu en Buffalo a chavales de entre 7 y 16 años, en una iniciativa de la North American Basque Organization.