EL célebre actor francés Gérard Depardieu bromeó en un programa de televisión acerca del incidente que protagonizó el pasado agosto, cuando orinó sobre la moqueta de un avión por no poder acceder al lavabo durante la fase de despegue. "No estoy enfermo, no soy un monstruo ¡solo quería orinar!", exclamó el intérprete de El conde de Montecristo en tono jocoso, después de explicar que la azafata le bloqueó la puerta del lavabo con su pie y le conminó a volver a su sitio. Depardieu se expresó así por primera vez sobre ese incidente en el programa que el presentador estrella Anderson Cooper tiene en la cadena estadounidense CNN, quien al comentar la noticia sufrió un ataque de risa en directo.
Varios sitios en internet reprodujeron las imágenes de la entrevista del actor galo con el presentador estadounidense. "Vi su risa y me hizo mucha gracia, porque es como cuando uno tiene pis y no puede parar", le espetó Depardieu al presentador del espacio televisivo sobre actualidad Anderson Cooper 360º. El ganador de un César por su papel en Cyrano de Bergerac explicó que, aquel día, regresó a su asiento tras la negativa de la azafata y que un amigo con el que viajaba le tendió un botellín de agua vacío para que se desahogase. "Cogí la botella y oriné, ¡Era tan bonito!", exclamó Depardieu, antes de puntualizar que, al ser un recipiente pequeño, desbordó "un montón" por lo que la azafata se puso a chillar.
Agregó también que cuando miró a su alrededor tenía a los viajeros estupefactos captando la escena con las cámaras de sus móviles. "¿Qué pasa? ¡Solo estoy orinando!", rió el actor, quien dijo que en Francia "todo el mundo cree que puede ser periodista".
Aunque en un principio los testigos alegaron que el actor estaba ebrio en el momento de los hechos, Depardieu respondió con un escueto "no" a la pregunta de si había bebido alcohol.
parís-dublín El incidente tuvo lugar el pasado 17 de agosto en un vuelo París-Dublín, ciudad a la que se dirigía acompañado por el actor Édouard Baer para participar en el rodaje de la nueva entrega de Astérix y Obélix. Depardieu, que se dio a conocer en Estados Unidos con el filme Green Card (Matrimonio de conveniencia), es uno de los actores mejor pagados de Francia, con 2,7 millones de dólares (unos 1,9 millones de euros) ingresados el año pasado, según una clasificación del diario Le Figaro. El actor mantiene un fuerte ritmo de trabajo, a pesar de que en octubre de 2005 anunció su intención de retirarse del cine. Rodó cinco largometrajes en 2010 y tiene una decena de proyectos previstos, entre ellos el de encarnar por tercera vez a Obélix, en Astérix et Obélix: God Save Britannia.