WASHINGTON. Los científicos conocían la existencia de planetas circumbinarios pero esta es la primera vez que logran captar el movimiento del planeta alrededor de sus dos soles, gracias a las imágenes del observatorio espacial Kepler.

El equipo liderado por Laurance Doyle del Instituto SETI de California anunció hoy el hallazgo del planeta, que se llamará Kepler 16-B, en una rueda de prensa en la que se intercalaron también imágenes de la saga de George Lucas.

Kepler 16-B orbita ambas estrellas a la vista del telescopio espacial Kepler. Los dos soles también se eclipsan el uno al otro, lo que permite mediciones bien precisas de la masa, el radio y las trayectorias de los tres cuerpos por primera vez.

"Una vez más, lo que solía ser ciencia ficción se ha convertido en realidad", señala Alan Boss, uno de los científicos que participa en el proyecto, en la revista Science, que publica el hallazgo.

Se trata de un planeta parecido a Saturno, aunque tiene una densidad superior al promedio y viaja en una órbita casi circular de 229 días alrededor de sus dos estrellas.

Ha sido detectado a unos 200 años luz de la Tierra y demuestra la diversidad de los planetas que existe en la Vía Láctea, aseguró Nick Gautier, científico del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena (California).

Las dos estrellas representan el 20 y 69 por ciento de la masa del Sol, respectivamente y siguen una órbita excéntrica de 41 días una alrededor de la otra, señala el estudio.

Dada la relación de este planeta con las estrellas, Doyle y su equipo también sugieren que el planeta se formó en el mismo disco de polvo y gas que dio origen a ambos soles.

Kepler es la primera misión de la NASA capaz de encontrar planetas del tamaño de la Tierra cerca de la llamada "zona habitable", la región dentro de un sistema planetario donde puede existir agua líquida en la superficie del planeta en órbita.

Lanzado en marzo de 2009, el objetivo del Kepler es recoger datos y pruebas de planetas que orbitan alrededor de estrellas con condiciones de temperatura medias donde pueda existir agua líquida y, por tanto, vida.

A pesar de que serán necesarias observaciones adicionales para lograr ese hito, Kepler ha detectado planetas y candidatos a ser planetas de una amplia gama de tamaños y distancias orbitales que según la NASA ayudan a comprender mejor nuestro lugar en la galaxia.