Un retrato de Elizabeth Taylor creado por Andy Warhol se vendió ayer en Nueva York por 26,96 millones de dólares, en una puja en la que otra de sus obras, elaborada en colaboración con Jean-Michel Basquiat, superó todos los pronósticos y se adjudicó por más del doble de lo calculado. Cuando aún no se han cumplido dos meses de la muerte de la actriz londinense, y tan sólo un día después de que otro retrato del padre del pop art se vendiera por 38,4 millones de dólares, no era de extrañar que triunfara la combinación Taylor-Warhol.