Vitoria. Es cierto que todavía quedan detalles por definir como quién protagonizará las madrugadas, cómo se configurarán los mediodías en el Falerina, qué combo recorrerá las calles a golpe de improvisación... y algunos flecos más tanto oficiales como paralelos. Pero el cuerpo fundamental de la trigésimo quinta edición del Festival de Jazz de Vitoria ya tiene forma definida en Mendizorroza y en el Principal. Es más, se prepara para lanzar al mercado sus primeros abonos y entradas, algo que ocurrirá el próximo lunes 28. El calendario ha empezado a correr su recta final, la misma que concluirá entre el 10 y el 16 de julio.

En lo que respecta al viejo pabellón deportivo, pocas eran las incógnitas que quedaban por responder, aunque alguna de ellas muy importantes, tras saber hace ya unas semanas que por sus tablas pasarán nombres como los de Craig Adams, Trombone Shorty, Nigel Kennedy o Jamie Cullum, entre otros. La primera duda, por lo menos cronológica, se refería al Picnic de Nueva Orleáns, que por primera vez contará sólo con grupos de Gasteiz. En concreto, los bomberos B3 Dixieland y los inagotables The Hot Wok.

Los otros dos conciertos que todavía no tenían dueño se referían a las dobles sesiones del viernes y sábado. En lo que respecta al día 15, Rubén Blades podrá esperar a que comience su actuación escuchando a un nombre de auténtico lujo, el pianista dominicano Michel Camilo. Poco se puede decir de un músico que en sus pasos tanto por Vitoria como por todo el mundo ha dejado momentos inolvidables. Junto a él se encontrará el percusionista Giovanni Hidalgo, todo un trotamundos inagotable.

La otra actuación que hasta ayer no tenía nombre era la que abrirá la jornada de clausura, ese sábado 16 dedicado a la figura de Miles Davis en el 30 aniversario de su muerte. La mera presencia de Marcus Miller, Herbie Hancock y Wayne Shorter es un reclamo inigualable. Sin embargo, el certamen ha querido redondear esa noche con la actuación de Danilo Pérez y su trío. El pianista panameño será el encargado de poner los primeros sonidos a una doble sesión que promete grandes emociones.

Eso sí, cuidado porque puede haber alguna que otra sorpresa, no esa misma noche, sino la anterior. Es conocido que Rubén Blades y Danilo son viejos amigos, y el pianista va a llegar a Vitoria con tiempo suficiente para, si quiere y se dan las circunstancias, acompañar al cantante en algún tema. Y ya se sabe que en Gasteiz esas cosas suelen suceder.

En las tardes Nada se sabía hasta ahora del programa del Jazz del Siglo XXI, algo que ayer también se solucionó de una tirada. Veteranos y jóvenes promesas se volverán a unir este año en el Principal.

Como de costumbre, los primeros pasos se darán con Konexioa, esa ventana abierta al encuentro entre músicos vascos y americanos. Esta vez el protagonista será el vitoriano José Agustín Guereñu Gere, que contará, como invitado, con la presencia de Lou Marini, saxofonista al que incluso los no iniciados recordarán por su participación en la banda The Blues Brothers.

Tras ellos, el Principal recibirá al veterano músico vasco-francés Michel Portal, al joven saxofonista David Binney, al más que talentoso Alfredo Rodríguez, al destacado pianista Fred Hersch (quien será el encargado de impartir el Seminario de Jazz de este año) y al impresionante trompeta Jeremy Pelt.

La taquilla Con el grueso del cartel cerrado, llega también el momento de que el público de aquí y de fuera vaya reservando su espacio tanto en el Principal como en Mendizorroza, algo que se podrá hacer dentro de casi nada. De hecho, entradas y abonos estarán a la venta a partir de las diez de la mañana del 28 de este mismo mes tanto en la página www.jazzvitoria.com como en los centros de El Corte Inglés.

En lo que respecta al escenario de la calle San Prudencio, todas las actuaciones costarán 12 euros, salvo las del lunes (es decir, Konexioa), que se venderá por 10. Además, los pases para el global de los conciertos se podrán retirar por 55 euros.

Por su parte, en Mendizorroza, el Picnic será, como siempre, gratuito, mientras que la Noche del Gospel costará 15 euros. En cuanto a las dobles sesiones, martes y miércoles supondrán 25 euros, jueves y viernes 35, y sábado 40 euros. Los abonos numerados costarán 175 euros, diez más que el año pasado, y los no numerados 108, el mismo coste que en los últimos tres años. Y es que el certamen ha querido mantener su política de contención de precios de los últimos tiempos consciente de las consecuencias de la crisis.