Barcelona. El Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA) duplica los espacios expositivos de su fondo permanente con una nueva exposición, que incluye más de 500 obras y documentos, con numerosas recientes adquisiciones.
El director del MACBA, Bartomeu Marí, explicó ayer que el cambio que se ha producido en la presentación de la colección no es sólo cuantitativo, sino también cualitativo. La colección MACBA se mostrará a partir de ahora de forma permanente y rotatoria en la Planta 1 del museo, lo que representa duplicar el espacio expositivo, de 750 a casi 1.500 metros cuadrados. Una de las novedades es la integración en el discurso expositivo de obras de titularidad de varias instituciones públicas y privadas españolas y europeas, entre ellas el MNAC o la Fundación La Caixa. Desde el punto de vista cualitativo, la colección MACBA crece ahora "dirigiendo su atención hacia una concepción de la práctica artística que va más allá de las artes visuales". Lejos de ser un fondo acabado que cubre exhaustivamente un período determinado de la historia reciente, la colección pretende ser, en palabras de Marí, "un organismo vivo que se alimenta de los debates e interrogantes generados por el presente".
Del presente al pasado, artistas de distintas generaciones y procedencias se encuentran reunidos aquí en entornos temáticos que rompen la linealidad de la sucesión cronológica. Según el director del museo, "la nueva presentación de la colección parte de la tesis de que la eclosión estética de la modernidad se produjo en nuestro contexto cultural a partir de la década de 1950, y no de la primera mitad del siglo XX". Desde entonces y hasta la década de 1980, añade Bartomeu Marí, la práctica del arte debe ser considerada en correspondencia con la arquitectura y el diseño.
Piezas de Thomas Bayrle, Bestué-Vives, Richard Hamilton, Marcel Broodtaers, Nigel Henderson, Josep Maria Mestres Quadreny, Eduardo Paolozzi y Antoni Cumell también han sido incorporadas también recientemente a la colección MACBA. La exposición se complementa con pinturas, fotografías, esculturas y documentos de instituciones como la Fundación La Caixa, el Archivo Coderch, la Biblioteca Museo Víctor Balaguer, el MNAC o la Biblioteca de Cataluña.
En opinión de Bartomeu Marí, la colección que ahora presenta el MACBA ofrece una "idea de servicio público" que se expande y articula en función de las necesidades de los proyectos narrativos; por tanto, no sólo se refiere a un patrimonio material e inerte, sino que se identifica con la voluntad de ser motor de ideas".