Bilbao. Ian Anderson, de Jethro Tull, John Mayall, Albert Lee, Bill Wyman y Charlie Watts de los Rolling Stones o Marianne Faithfull son algunos de los grandes y veteranos nombres que visitarán en los próximos meses la Sala BBK de Bilbao, dentro del ciclo musical que fue presentado ayer y que recibe el nombre de Music Legends. Leyendas de la música.
El guitarrista británico Wilko Johnson, ex líder y fundador del grupo de rhythm and blues Dr. Feelgood, fue el encargado ayer de dar el pistoletazo de salida al ciclo, que "pretende convertirse en un referente musical para aquellos rockeros y rockeras de Bilbao y Bizkaia que quizás dejaron de ser unos chavales, y a quienes les puede apetecer ver a estos rockeros de toda la vida en un local como la Sala BBK, que ofrece un formato perfecto para conciertos no masificados", señaló el director de la Fundación BBK, Gorka Martínez Salcedo.
"Uno de nuestros objetivos es -apuntó Martínez- hacer un hueco en la Sala BBK a aquellas aventuras musicales de artistas que se dieron a conocer en grandes grupos como los Rolling Stones, Cream, Jethro Tull o alguno más con el que estamos conversando, y que tienen aun cosas muy interesantes que contar".
Junto con el concierto de Wilko Johnson, el ciclo confirmó hasta el momento las visitas del guitarrista y flautista escocés Ian Anderson, líder de los Jethro Tull (8 de febrero), John Mayall, considerado uno de los guitarristas más influyentes del siglo XX (14 de junio), Albert Lee con los Hogan"s Heroes (24 de junio), y del ex bajista de los Rolling Bill Wyman, que se trasladará a Bilbao acompañado por sus Rhythm Kings el 11 de julio en un nuevo regreso a Euskadi, donde ya ha actuado en varias ocasiones (la última, en Gasteiz).
La primera leyenda invitada, Wilko Johnson es un buen conocido del público del País Vasco, donde ha actuado en directo en numerosas ocasiones. Johnson es famoso por su peculiar estilo de tocar la guitarra, un estilo muy personal que se convirtió en una de las señas de identidad de su banda, Dr. Feelgood. Johnson no utiliza púa para tocar la guitarra, lo que le permite interpretar a la vez solos y ritmo. Todo ello, unido a sus potentes riffs, logra dar la sensación de que están sonando varias guitarras a la vez, como lo pudieron comprobar todos aquellos que le disfrutaron ayer por la noche. Eso sí, sólo es la primera actuación de una propuesta que dará más de sí.