Pueden ser una buena opción para los más nostálgicos de cara al cambio de año y a los consiguientes e inevitables regalos. Universal y Sony Music han hurgado en los cajones y viejos archivos de Jimi Hendrix y Bob Dylan, respectivamente, para alimentar a su amplia y siempre insatisfecha comunidad de seguidores. Del flamígero guitarrista se puede conseguir una caja con 4 Cds repletos de versiones de sus clásicos, en curiosas tomas, o su correspondiente versión reducida, y del bardo folk se edita otro volumen doble de The Bootleg Series, en este caso con grabaciones áridas del inicio de su carrera, cuando la gloria todavía quedaba lejos en el horizonte.

Ambos artistas estuvieron unidos por el trabajo de algún colaborador (el publicista y productor Michael Goldstein) y cierta admiración mutua. Especialmente de Hendrix hacia Dylan, del que versionó All along the wathctower, Like a rolling stone, Can you please crawl out your window... y Tears of rage. Este último es un tema cedido por Dylan para el debut de The Band y que está disponible ahora West coast Seattle boy: The Jimi Hendrix anthology (Universal), una caja de 4 Cds, con su correspondiente resumen en un disco normal con 15 cortes seleccionados. Ambos adjuntan un Dvd con el mítico documental Voodoo child, en el que el artista cuenta su vida y ofrece algunos de sus conciertos e interpretaciones más incendiarios junto a otros más desconocidos.

Este lanzamiento, que se une al aluvión de publicaciones y reediciones de la discografía oficial y de inéditos impulsada por los herederos de Hendrix, puede calmar el apetito de los seguidores del guitarrista con decenas de cortes oscuros o de tomas alternativas y desconocidas grabadas en estudios de New York y Londres, y hasta en alguna habitación de hotel. Con un sonido más que notable, destacan la citada versión de Dylan, algunas colaboraciones de lujo (es curioso que en algunas canciones se desconozcan algunos de los intérpretes) y un rosario de grabaciones que beben del rock, el soul, el blues y hasta del clasicismo de Elvis, Cochran y Berry, como demuestra su cover de Hound dog blues. Destacan, de forma especial, Fire, Room full of mirrors, la toma de Are you experienced?... Todas grabadas entre 1967 y 1990.

En el caso de Dylan, The Witmark Demos, 1962-1064, supone el noveno volumen de The Bootleg Series, esa colección que está rescatando momentos y canciones oscuras de su carrera, tanto en directo como en estudio. En este caso, se atiende a la primera época de su carrera, cuando el gran Bob había desembarcado en el New York folk y bohemio de inicios de los 60 y, henchido del espíritu de Woody Guthrie y algo del de Howlin" Wolf, se vio obligado a grabar una serie de sesiones para intentar que algunos autores consagrados grabaran sus canciones. En el caso de cortes como Tomorrow is a long time, lo logró con Judy Collins.

En el doble disco, de sonido adusto, guitarra de palo y voz, con algún piano y armónicas como único lujo en los arreglos, se pueden vislumbrar ya esbozos de cómo serían clásicos de su carrera como Blowing in the wind, Masters of war, Mr Tambourine man, Don"t think twice it"s allright o A hard rain" a-gonna fall, aunque la mayoría de su casi medio centenar de temas (todos entre el folk y el blues) son canciones más oscuras de su discografía, incluso rarezas, que se ofrecen, en ocasiones, en un ambiente de naturalidad absoluta, entre toses, parones y comentarios. También se ha editado una caja, The original mono recordings, en el que se agrupan sus primeros 8 discos en sonido monoaural.