MADRID. Fundada en 2002, InTouch Health es un proveedor de presencia a distancia que permite al usuario estar en dos lugares a la vez gracias a tecnología de movilidad. La compañía cuenta con más de 60 empleados y cuenta con sede en Santa Bárbara, California.
El tiempo de un médico es precioso por lo que cualquier nueva tecnología que puede mejorar su disponibilidad es buena medicina. A tal fin, InTouch Salud ha desarrollado un sistema robótico de presencia remota (PR-7) que los médicos puede utilizar para prestar atención médica personal, sin tener que estar físicamente en el sitio.
El hospital cuenta con un móvil de poco más de un metro y medio de alto, el RP-7, con una pantalla de 15 pulgadas que hace las veces de cabeza. El médico de forma remota se conecta al robot RP-7 a través de Internet y emplea video y audio para tener conversaciones con el personal y los pacientes en tiempo real.
Anteriormente, la solución sólo estaba disponible cuando los médicos podían acceder a una conexión a Internet por cable o vía un punto de acceso Wi-Fi. Sin embargo, el verdadero objetivo era brindar a los médicos más libertad geográfica para utilizar el sistema de forma remota y así seguir manteniendo la atención personal con sus pacientes.
De esta forma, InTouch Health abrazó la tecnología EV-DO para conexiones 3G de Qualcomm (http://www.qualcomm.es/). Mediante un portátil denominado ControlStation equipado con una cámara y un joystick, puede controlar a distancia y desde cualquier lugar el dispositivo, que por supuesto funciona de manera inalámbrica y "autónoma". Los médicos utilizan tarjetas en sus portátiles para ganar conectividad a través de la banda ancha móvil de Sprint y Verizon Wireless.
"Ahora los médicos pueden acceder a la RP-7, prácticamente en cualquier lugar: en su casa, en una casa de vacaciones o durante el viaje, incluso si no hay Internet", dice Michael Chan, vicepresidente ejecutivo de ventas y comercialización de InTouch Health. "Gracias a la tecnología 3G, nuestros médicos no tiene que ser capaz de conectarse a una red establecida por cable o un punto Wi-Fi, lo que les da mayor libertad y flexibilidad".
El primer uso de la conectividad portátil EV-DO fue en la granja de un médico, recuerda Chan. "El médico puso la tarjeta inalámbrica en su portátil y apareció delante de los pacientes, a pesar de que estaba de 50 a 60 millas del hospital".
Desde el punto de las enfermeras, el RP-7 les da más tiempo para estar cara a cara con los médicos. "La mayoría de los médicos viven 30 a 45 minutos de distancia del hospital", apunta Chan. "La presencia remota permite a todos los médicos conectar con las enfermeras y pacientes con más frecuencia" y en "las diferentes etapas del día".
Los centros también se benefician de la solución 3G. Una tarjeta EV-DO instalada dentro de un router Wi-Fi permite a la empresa crear un improvisado 'hot spot' en un hospital de campaña creados en situaciones de emergencia, por ejemplo.
Los primeros comentarios son muy positivos de acuerdo a Chan. "La satisfacción del paciente es alta, ya que pueden ver a su médico una o dos veces al día en lugar de hablar con un médico de cabecera que no puede estar tan familiarizado con ellos o su caso. Cuando la cara de su médico está en la pantalla, la gente dice que llega a olvidar que estamos hablando de un robot". Por su parte, la satisfacción de los médicos es alta, también.
Más de 120 robots ya están en siendo utilizados, la mayoría en los EE.UU.