Donostia. La dirección del museo Chillida-Leku en la localidad de Hernani (Gipuzkoa) anunció ayer su cierre temporal a partir de enero por el déficit que padece, mientras que las instituciones vascas negocian con sus responsables las posibilidades de continuidad sobre la base de cambios patrimoniales y del modelo de gestión. Por su parte, la familia Chillida, que gestiona el museo, confirmó en un comunicado que ha presentado un expediente de regulación de empleo (ERE) y que el espacio expositivo cerrará sus puertas a partir del 1 de enero de 2011.
Garantías
Informe de la situación actual
Se trata de un cierre "temporal" que está motivado por la "situación de déficit recurrente" que padece este museo, y que se ha visto agravada por la "crisis económica general".
Según explicó la familia Chillida, la situación de déficit de este espacio expositivo es similar a la que padece "la práctica totalidad de los museos de obra artística", si bien la coyuntura económica actual ha "disparado las cifras deficitarias a niveles insostenibles desde la perspectiva de una iniciativa privada".
El ERE, cuya tramitación ya ha sido solicitada por los responsables del museo, afectará a los 23 empleados que actualmente trabajan en Chillida-Leku.
La dirección de este centro de arte, que este año ha cumplido su décimo aniversario, avanzó que sigue, no obstante, "abierta a un acuerdo que respete las condiciones que considera imprescindibles para asegurar la continuidad" del proyecto "tal y como lo definieron Eduardo Chillida y Pilar Belzunce, sus creadores".
Tras el anuncio del museo, tanto la Diputación de Gipuzkoa como el Gobierno Vasco aseguraron que mantienen contactos con la familia Chillida desde hace más de un año para buscar alternativas de gestión que permitan garantizar la continuidad del proyecto, pero advirtieron de que estas negociaciones deben llevarse a cabo con "discreción".
El departamento de Cultura del Gobierno Vasco, asimismo, indicó que ha estado trabajando con la familia Chillida en la elaboración de "un sólido informe de situación tanto de la gestión del espacio actual" como de su "propiedad". El objetivo de dicho documento es que "sirva para emprender una negociación a varias bandas que, de resultar exitosa, pueda asegurar la continuidad futura" de esta instalación.
La elaboración de este "informe técnico" , que ya ha concluido y ha sido presentado a la familia Chillida, es el trámite con el que "acaba de iniciarse el proceso de negociación para tratar de buscar una solución futura" sobre la "doble base" de "un modelo de gestión sostenible para el espacio, y un estudio que de posibilidades a la idea de compartir" su "propiedad patrimonial".
reacciones
Prudencia ante la decisión
El Gobierno Vasco ha agregado que "Chillida Leku es una de las referencias patrimoniales y culturales más importantes con que cuentan Gipuzkoa y Euskadi", y por lo tanto, se ha comprometido a "hacer lo posible por su continuidad". Por su parte, la diputada de Cultura de Gipuzkoa, María Jesús Aranburu, insistió en pedir discreción sobre este proceso, en el que cada una de las partes pone sus condiciones, la familia Chillida porque vela por la ideología del museo y las instituciones porque trabajan con dinero público.
La diputada destacó, por otra parte, que no se trata de un cierre "definitivo", tras lo que ratificó que, junto con el Gobierno Vasco, mantiene contactos con la familia Chillida para buscar una solución dada la importancia del museo y la obra del escultor guipuzcoano.
Por último, el alcalde de la San Sebastián, Odón Elorza, insistió en la propuesta que efectuó el pasado lunes para constituir una mesa de trabajo con las instituciones "vascas y estatales", para "abordar una solución al museo Chillida Leku" sobre la base "de un cambio de modelo de gestión".