MADRID. "Tres metros sobre el cielo", la exitosa novela del italiano Federico Moccia, aterriza este viernes en los cines de la mano de Mario Casas y María Valverde, que se adentran en la historia del primer amor juvenil entre el chico malo y la niña bien.

La película está dirigida por Fernando González-Molina, que como ya hiciera en "Fuga de cerebros", vuelve a reunir en "Tres metros sobre el cielo" ("3MSC") a un reparto joven que, además de Casas y Valverde, cuenta con Álvaro Cervantes ("El juego del ahorcado"), Nerea Camacho ("Camino") y los actores televisivos Andrea Duro ("Física o Química") y Luis Fernández ("Los protegidos"), entre otros.

En "3MSC", Mario Casas es 'H', un joven rebelde y problemático que no se separa de su moto y que no tiene reparos en meterse en peleas. A todo lo contrario da vida María Valverde en 'Baby', de clase alta, inocente y bien educada a punto de cumplir 18 años.

Poco o nada tienen en común, salvo cumplir la percepción de que los polos opuestos se atraen, por lo que así nace y crece esta historia de amor imposible pero inevitable rodada en Barcelona y que sus protagonistas han presentado hoy en Madrid.

Para su director, Fernando González Molina, se trata de una historia de emociones, "un viaje iniciático para que la gente de cualquier edad vuelva a vivir y se emocione con esa primera historia de amor".

González Molina ha defendido el cine comercial con la "voluntad de entretener como máxima aspiración a la hora de hacer cine".

"Quiero que la gente vaya a ver las películas que hago y no me avergüenzo de decirlo. Creo que es importantísimo que las películas las hagas para que la gente vaya a verlas", ha asegurado el director, que también ha señalado que rodarlas cuesta "mucho dinero y esfuerzo" y "no te puedes permitir hacer algo que no llegue si queremos industria".

Sobre el público, Mario Casas rechaza la idea de que la película atraiga exclusivamente a adolescentes. "La película va dirigida a todo el mundo, tengas la edad que tengas, quieres o recuerdas lo que les ha pasado a los protagonistas", asegura el actor, para quien "3MSC" es más que una historia de amor.

Un amor en el que se sumergieron Casas y Valverde porque "Baby y 'H' se enamoraron de verdad, interpretamos lo que nos hubiera gustado vivir en nuestra adolescencia".

"María se enamoró de mí durante el rodaje y le tuve que decir que no", bromea Casas, a lo que Valverde, más tímida, apostilla: "No estoy enamorada de Mario Casas, es él el que está loco por mí".

Lejos de declaraciones de amor, tanto Casas como el propio director han justificado que ningún personaje lleve casco en las múltiples escenas de paseos y carreras ilegales de motos que llenan la pantalla.

"Es obvio que hay que ponerse el casco. No queremos hacer un alarde de no usarlo", asegura González Molina, al tiempo que Casas afirma que "H iría sin casco, el personaje es así" y explica que todas las escenas estaban muy controladas.