LA cantante Chavela Vargas, con 91 años a cuestas y visiblemente abatida por la edad y una operación reciente en el estómago, quiso grabar un disco a su manera: "Con quien se me dé la gana, como se me dé la gana y porque me da la gana". También quiso que fuera una producción de la que recibiera la mayoría de las ganancias, que será finalmente el 85%, algo que ninguna otra productora le había dado en sus largos años de carrera. Y así lo hizo. El nuevo disco, que presentó el jueves por la noche en Ciudad de México, se titula ¡Por mi culpa! Chavela Vargas y sus amigos. Todos los discos anteriores, más de 70 entre grabaciones y recopilaciones, "los han reproducido sin que yo me entere, sin darme regalías, sin tomarme en cuenta, puro negocio de las disqueras comerciales, pura burla", dijo Chavela en un mensaje leído en su presencia por su amiga María Cortina. Ella, que descansaba en un enorme sillón, con sus eternas gafas negras como cortinas protectoras, apenas tenía fuerzas para saludar al público y musitar alguna estrofa, pero agradecía el cariño; sus fuerzas no le permitieron hablar pero al menos pudo viajar desde su domicilio en Tepoztlán, a hora y media de Ciudad de México. Este disco "posiblemente sea el último", según Eduardo Llerenas, director de Discos Corasón, el sello encargado del lanzamiento. "Nadie lo quiere decir, pero es muy posible. Chavela ya está bastante mal".
En esta aventura acompañan a la cantante -nacida el 17 de abril de 1919 en Costa Rica-, las mexicanas Eugenia León en Mis ciudades, Lila Downs en Vámonos y la chelista Jimena Giménez Cacho en Un mundo raro. También participan Joaquín Sabina cantando juntos Nosotros, la argentina La Negra Chacra en Las simples cosas y el compositor y cantante estadounidense Pink Martini con Piensa en mí. En este álbum Chavela interpreta un tema en solitario, Luz de luna, y una canción de su puño y letra titulada ¿A dónde vas paloma?, acompañada de Mario Ávila. La cantante prácticamente se despidió el jueves de sus amigos y de su público. "Hoy estoy aquí con todos estos años encima, con la fuerza que me dan ustedes mis amigos, con el público. Esa fuerza que no acaba", dijo Chavela en la voz de Cortina. "Aunque me vean así, sin poder caminar, cansada de mi cuerpo, todavía tengo fuerza, me lo llevo conmigo a donde sea que me vaya, allá, al otro lado, a ese paraíso a donde van los cantantes, los poetas, los tequileros, allá donde está mis otros cuates que se fueron antes, Frida (Kahlo), José Alfredo (Jiménez), allá me esperan ellos y los esperaré yo a ustedes cantando", declaró. En diciembre de 2007 ofreció un recital en el Auditorio Nacional de Ciudad de México que tuvo que interrumpir y salir del escenario en silla de ruedas. Después le ha dado tiempo a escribir dos canciones, participar en la película Hasta el último trago..., corazón, de Beto Gómez, y escribir con Cortina el libro autobiográfico Las verdades de Chavela.