SI el Superagente 86 hubiera asistido esta semana al congreso de telefonía móvil de Barcelona enterraría su zapatófono justo al lado de Tuttankamon. Porque la telefonía móvil ha avanzado muchos lustros en pocos años. La búsqueda de El Dorado tecnológico ha sido el objetivo de una de las mayores ferias de telefonía mundial repleta de terminales inteligentes. Teléfonos con navegación, juegos, música y vídeos, el móvil convertido en ayudante de cámara y en aparato de cabecera. Teléfonos que apagan los ordenadores ya que proporcionan información de trenes y vuelos, conectan con Facebook, con el trabajo y con el mundo.
El elemento clave son los apps -abreviatura de aplicaciones- que se refiere específicamente a aplicaciones para smartphones, los teléfonos de última generación con avanzadas prestaciones que ya el año pasado compraron siete de cada diez usuarios en el mundo. En esta feria se han presentado alrededor de cincuenta novedades que estarán disponibles en el mercado este año. La mayoría de ellas han asumido el concepto de móvil que planteó Apple como referencia y sus características más importantes (gran experiencia táctil, navegador para las tecnologías, aplicaciones vía tienda e integración con servicios online). Todas al alcance de los fabricantes gracias, sobre todo, a la plataforma Android, uno de los sistemas operativos que más crece.
Circulan ya decenas de miles de apps y los usuarios disponen de más de 100.000 pequeños programas a elegir. Entre los más populares están PocketGuitar, que convierte el teléfono móvil en una especie de guitarra virtual, y Shazam, que entrega el título de una canción escuchada a través del teléfono. Pero el mundo de los gadgets es infinito y prácticamente todos los fabricantes han acudido a Barcelona con grandes estrenos: HTC, LG, Motorola, Samsung, Sony Ericsson, Alcatel, Dell, Huawei, ZTE... -sólo faltó Apple-, sin despreciar a Nokia, que aunque no ha participado en la feria de forma directa, ha comparecido en un espacio independiente. Las novedades han apabullado a los 50.000 visitantes ya que algunas compañías se han atrevido incluso con demostraciones en 3-D.
Toshiba, por ejemplo, presentó el G450, un módem USB que es a la vez teléfono y mp3. Con tan sólo 57 gramos de peso y 98 mm de tamaño, cabe en cualquier bolsillo y ofrece unas prestaciones de movilidad muy completas. Samsung dio la campanada con un móvil cuya batería dura más de un mes. El móvil, que se llama E2370, saldrá al mercado español en abril y costará libre poco más de 100 euros. Es un terminal robusto, apto para actividades al aire libre y de los considerados sencillos. El teléfono tiene una pequeña pantalla de 1,77 pulgadas, cámara simple de vídeo y foto, radio, reproductor MP3, pero no se conecta a internet y ni siquiera es tribanda. La batería permite aguantar un tiempo récord, que los responsables de Samsung cifran, en un uso de 22 horas de conversación y 62 días en reposo.
el lujo al alcance de todos
Pantallas táctiles
A pesar de que la inmensa mayoría de la población use un teléfono básico, capaz sólo de recibir llamadas y mensajes, el futuro inmediato está destinado a que los móviles tengan como función principal la transmisión de datos. Es decir, que ofrezcan funciones avanzadas y conexión permanente a la red. Teléfonos inteligentes con pantallas táctiles, cámaras de buena resolución y preparados para navegar por internet. Y lo que es más interesante, dejan de ser elitistas y dan el salto al gran público con precios asequibles. Aunque una de las claves del congreso ha sido la LTE (Long Term Evolution) que promete llevar la banda ancha a las redes móviles y que ha sido bautizada como la 4G, las aplicaciones de los smartphones se han erigido en estrellas.
un microchip en los auriculares
Descolgar con la mirada
Descolgar el móvil con la mirada. Éste es el secreto del nuevo prototipo de auriculares que ha presentado en Barcelona la japonesa NTT DoCoMo y que permite un control del aparato sólo girando de los ojos. Los auriculares sólo son un prototipo y todavía no se comercializan pero NTT DoCoMo ya ha echado el anzuelo a posibles clientes. El sofisticado funcionamiento es posible gracias a que el auricular tiene un microchip que registra el movimiento de los globos oculares, incluso con los ojos cerrados, y que lo traduce en órdenes al móvil sin pulsar ninguna tecla. De hecho, está pensado para llevar el móvil en el bolsillo para que cuando suene se pueda aceptar la llamada con un movimiento de ojos.
Pero se han exhibido también proyectos que buscan que el móvil pueda ser un mando universal para que personas mayores o discapacitadas puedan utilizar cualquier dispositivo electrónico urbano (como un cajero o máquina de billetes de transporte público) o doméstico (como la lavadora).
Por su parte, la empresa sueca Alcosystems ha presentado un alcoholímetro que funciona conectado al móvil. Los principales destinatarios son los profesionales que trabajan al volante, desde camioneros a taxistas, para autocontrolarse, así como las empresas que les dan empleo, para hacer un seguimiento de sus plantillas. También las administraciones, para controlar a quienes exceden la tasa de alcoholemia.
En el terreno de las aplicaciones prácticas se pondrá al alcance de los usuarios aparatos que dan acceso a los bancos. Benjamin Binet, vicepresidente de la firma Gemalto, explicó que una de las ventajas de sus teléfonos es permitir a los usuarios gestionar sus cuentas bancarias desde el móvil o convertir este dispositivo en un sistema de pago.
Durante el Mobile World Congress han desfilado los teléfonos más avanzados del mercado, terminales con procesadores de 1GB, como los que utilizan los netbooks, con especificaciones técnicas envidiables y capaces de hacer multitud de cosas. Pero también se ha visto la otra cara de la moneda como el Vodafone 150 y el Vodafone 250, pensados para mercados emergentes, extremadamente funcionales y con un precio increíble: 15 y 20 euros respectivamente.