Para frotarse los ojos. Así ha sido la primera mitad del Baskonia en el derbi vasco ante el Bilbao Basket en el Buesa Arena en la que la tropa de Galbiati ha firmado unos números históricos que serán difíciles de olvidar.

Los 71 puntos conseguidos en esos 20 minutos iniciales repletos de acierto exterior, gran baloncesto y dinamismo ofensivo constituyen la cuarta anotación más elevada en la historia de la ACB, tan solo por debajo de los 78 puntos que el Barcelona materializó ante Caja Bilbao en la temporada 1986-87, los 73 del propio Barcelona al Breogán en la campaña 1985-86 y los 72 endosados por el Real Madrid al cuadro lucense en ese mismo ejercicio.

Sentando las bases de una cómoda victoria que no se vio discutida en ningún momento, la escuadra vitoriana ha rubricado un increíble vendaval ofensivo ante los murmullos de admiración del Buesa Arena, que no ha dado crédito al torrente de juego, canastas espectaculares y triples de sus pupilos en una matinal donde los hombres de Galbiati han asegurado un triunfo vital para seguir en la pelea por la Copa del Rey.

El Baskonia ha adornado su estadística con 12 de 17 en triples y la friolera de 15 asistencias par irse al descanso 25 puntos arriba (71-46).

El jugador más desatado ha sido una vez más Luwawu-Cabarrot con un sobresaliente pleno de acierto desde la larga distancia (5 de 5 en triples), bien secundado por Markus Howard, Hamidou Diallo o Mamadi Diakite.

Esos 71 puntos en la primera mitad, como se ha encargado de recordar el Baskonia en sus redes sociales, suponen la cifra más alta de anotación de un equipo en este siglo XXI y constituyen un récord del club en su historia. La mejor marca hasta la fecha estaba en poder del Real Madrid, que en 2008 endosó 70 al Grupo Capitol Valladolid.

Por razones obvias, el Baskonia no pudo mantener este inclemente ritmo anotador tras el intermedio, pero ello no resta ni un ápice de mérito a una primera mitad que ha servido para dar continuidad a los grandes resultados de esta campaña al amparo de su afición.