La temporada 2024-25 se ha adentrado desde hace semanas en su momento culminante y, si bien el presente es ilusionante para muchos clubes con la posibilidad de ganar algún título entre manos, en todos los despachos de las secretarías técnicas ya se empieza a planificar el futuro.
Entre los cotizados agentes libres que saldrán al mercado este verano y la imperiosa necesidad de muchos clubes para reforzar sus plantillas, el baile de nombres puede volver a resultar ciertamente espectacular.
Eso sí, algunos han querido adelantar el trabajo para no acusar más adelante los perniciosos efectos de un mercado cada vez más inflacionado debido a la falta de jugadores desequilibrantes y la eterna amenaza de la NBA o últimamente la propia NCAA.
El exbaskonista Tornike Shengelia cerrará su etapa en Bolonia para unirse al Barcelona tras haber aceptado una oferta por tres temporadas. El georgiano es cupo para la ACB, por lo que se trata de un importante golpe de efecto por parte del club blaugrana en su intento de reforzar la posición de cuatro, debilitada por la grave lesión de Chimezie Metu.
El futuro de otro jugador que comparte posición en la pista con Toko, en este caso Nikola Mirotic, se encuentra lejos de Milán. El ala-pívot de 34 años apunta con claridad al Mónaco, que ya se interesó en su día por él para mantener su ambicioso proyecto. Al hispano-montenegrino le resta por cumplir una de las tres temporadas que firmó con el Armani después de salir convulsamente del Barcelona y tener casi cerrada su llegada al Partizan.
Sin embargo, en el contrato de Mirotic existe una cláusula que le permite desligarse este verano y, salvo sorpresa, eso es lo que sucederá. Recientemente llegó a reunirse con el propietario Giorgio Armani, que trató de convencerle para que echara raíces en tierras lombardas pero del citado cónclave no surgió un cambio de opinión por parte de la rutilante estrella a las órdenes de Ettore Messina.
El Mónaco, uno de los cuatro clasificados para la Final a Cuatro de Abu Dhabi, sigue empeñado en consolidarse entre los más grandes de la competición. Para ello, también podría tener ya atado al exterior Nadir Hifi, una de las sensaciones de esta edición continental en las filas del París Basketball a las órdenes de Tiago Splitter.
La amenaza de Dubai
El cuadro parisino se verá esquilmado este verano, ya que sus otras dos estrellas también abandonará la nave que de forma tan eficaz ha dirigido el técnico brasileño. No en vano, otro de los ricos de la competición como el Fenerbahce lidera la carrera para llevarse al eléctrico TJ Shorts, a quien también se ha vinculado con los Grizzlies de la NBA y Mikael Jantunen, revalorizados de manera espectacular en la capital gala.
El Dubái Basketball, aspirante a ingresar en la próxima Euroliga si se confirma en breve la ampliación a 20 equipos y que de momento compite en la Liga Adriática, se perfila como otro de los animadores del mercado estival. Dzanan Musa, que acaba contrato con el Real Madrid, se halla predestinado a ser la punta de lanza de un proyecto muy ambicioso que, además, persigue reforzarse con Mfiondu Kabengele, pívot del Reyer Venezia, o el base McKinley Wright.
Mientras tanto, David Kramer (Tenerife) y Theo Maledon (Asvel) son los dos nombres barajados por el Real Madrid para la próxima campaña. Ambas incorporaciones estarían avanzadas para reforzar a la entidad merengue.
El Hapoel Tel Aviv, que se ha llevado el premio gordo de jugar la Euroliga tras conquistar la Eurocup, tiene varios objetivos entre ceja y ceja para contentar a Dimitris Itoudis como Vasilije Micic –algo que sería un auténtico bombazo– y Jean Montero, aunque para reclutar al dominicano deberá abonar su cláusula de salida al Valencia Basket.
En definitiva, un mercado loco donde clubes con un presupuesto limitado como el Baskonia sufren cada vez más para hacerse con piezas de calidad.