Mismo ritual que un día de partido, pese a que en los aledaños del Buesa Arena no estaban ni el capitán Tadas Sedekerskis, ni Chima Moneke, ni Markus Howard ni cualquiera de los otros integrantes de la primera plantilla del Baskonia.

Los que entraban al fortín azulgrana pasadas las 16.30 horas eran 20 aficionados azulgranas dispuestos a vivir por un día la experiencia completa de sentirse de pleno jugador de la escuadra gasteiztarra.

Actuar en el Buesa Arena es una experiencia que todo seguidor baskonista ha soñado con vivir alguna vez en su vida y que esta tarde 20 seguidores del Baskonia han tenido la oportunidad de hacer realidad.

Los 20 ficionados azulgranas, que tuvieron la ocasión de sentirse jugadores del Baskonia por un día posan con los entrenadores Jokin Eguileor y Aritz Muguriza

José Javier, Santiago, Asier, Eneko, David, Víctor, Gorka, Itziar, José Luis, Álex, Aitor, Javier, Ekain, Iñigo, Itziar, Aritz, Prudencio, Juan Carlos, Iñaki y Borja pudieron vivir por unas horas las emociones que sienten los discípulos de Pablo Laso. Todos ellos disfrutaron de la sensación de ser jugadores del Baskonia. Un sueño cumplido de la mano de CaixaBank.

Como patrocinador oficial y socio financiero del conjunto azulgrana, la entidad financiera ha organizado esta tarde un encuentro amistoso entre 20 aficionados del club en el Buesa Arena para poner de manifiesto uno de sus objetivos como patrocinador del club: acercar el Baskonia a sus aficionados.

A primera hora de la tarde, los jugadores han sido recibidos en las instalaciones del Buesa Arena por Iñaki Gondra, director comercial de banca privada de CaixaBank, y a su vez uno de los 20 jugadores que tuvieron la ocasión de disputar el partido en el Buesa Arena.

Los aficionados azulgranas invitados por CaixaBank, durante la visita a la sala de prensa del Buesa Arena

VISITA GUIADA Y VESTUARIOS

Tras la recepción, este grupo de aficionados realizó una visita guiada por el pabellón, finalizando esta en los vestuarios. Allí encontraron una equipación personalizada para cada uno de ellos con la que disputar el partido. 

Los nervios entre este grupo de aficionados ya se empezaban a sentir. En capilla, todos ellos comenzaron a enfundarse la equipación baskonista en el mismo vestuario que los jugadores del primer equipo.

Santiago Alonso posa con la camiseta del Baskonia en uno de los vestuarios que puso el club a disposición de los jugadores azulgranas

Conociendo desde dentro los entresijos del club y disfrutando de primera mano del santuario de los jugadores del Baskonia. Ocupando las taquillas de los ídolos de la afición baskonista. En el sitio de Hall, Forrest, Baldwin y compañía. Sintiéndose en la piel de Tadas o el mismísimo Markus Howard.

Tocaba saltar a la pista y para ello estos 20 aficionados tuvieron que traspasar el mismo túnel de vestuarios que partido tras partido recorren los jugadores azulgranas. Todos ellos pudieron leer el famoso mensaje del club “Beyond this door only carácter” (Detrás de esta puerta, solo carácter).

La experiencia estaba siendo completa. Eran jugadores del Baskonia y se estaban comportando como tal. Poco después comenzaron a calentar, repartidos en dos equipos, bajo las órdenes de Aritz Muguruza y Jokin Eguileor, dos entrenadores del club. La hora del partido se acercaba y llegó la hora de las presentaciones. 

Los aficionados baskonistas, durante la visita guiada por el Buesa Arena, en la zona mixta del pabellón a la entrada de los vestuarios

SPEAKER, TÉCNICOS Y ÁRBITRO

Con Joxe Felipe Auzmendi, 'speaker' del Baskonia, como maestro de ceremonias fueron saltando a la pista uno a uno los 20 integrantes de los equipos Baskonistas y Azulgranas, mientras se podía ver su nombre con su dorsal sobreimpresionado en el vídeomarcador y en los leds del pabellón, al más puro estilo de las grandes noches de baloncesto baskonista.

Tan solo faltó un Buesa Arena con público para hacer la experiencia de vivir un partido como jugador del Baskonia más real si cabe. “Ya llegará, trataremos de mejorar este aspecto para el futuro”, señalan desde el gabinete de prensa de CaixaBank.

Los 20 aficionados posaron juntos antes del partido con el árbitro y los entrenadores, mientras escuchaban el himno de la Euroliga

Y es que por haber, hubo hasta posado de los dos equipos antes del inicio del encuentro mientras escuchaban el himno de la Euroliga.

Ekain trata de doblar el balón, durante el partido disputado por 20 aficionados baskonistas en el Buesa Arena

El famoso Devotion dio paso a la piña de los jugadores con sus respectivos técnicos para escuchar los últimos consejos antes del salto inicial de un partido que contó con Ion Oraa como colegiado y en el que el resultado del mismo fue lo de menos.

El sueño de convertirse en jugadores del Baskonia y vivir la experiencia completa de un partido ya se había cumplido.

Tras el encuentro, todos ellos disfrutaron de un exclusivo cóctel en el palco del Buesa Arena, donde tuvieron ocasión de interactuar y reponer fuerzas, inmortalizando este momento tan especial.