Toca levantarse tras el mazazo sufrido el martes ante el Olympiacos, cuando un reconocible y guerrero Baskonia cayó en las postrimerías del encuentro víctima de su falta de instinto asesino para rematar los partidos en finales ajustados

Al menos, la tropa de Laso mostró una versión más acorde a lo que se espera de ellos. Nada que ver con el bochorno perpetrado unos días antes en Fontajau ante el Girona. Es hora de dar continuidad al buen juego mostrado ante el poderoso conjunto del Pireo. Tiempo de olvidar las continuas subidas y bajadas a las que acostumbra la escuadra azulgrana en esta convulsa temporada.

El Baskonia busca poner fin a esta montaña rusa de altibajos entre un partido y otro y tratará de consolidar la buena imagen mostrada frente al líder de la Euroliga esta noche ante otro coco de la competición como el Panathinaikos.

Una reválida complicada, habida cuenta de la calidad del rival. El cuadro del trébol es no solo un serio aspirante a la Final Four, sino también un claro candidato a un título que ya conquistó la pasada temporada. Un ogro temible.

El Baskonia ya sufrió en sus propias carnes hace menos de un mes su voracidad. Los atenienses aniquilaron al conjunto vitoriano en un visto y no visto para imponerse finalmente por un contundente 104-69 en un partido marcado por la grave lesión de Lessort. 35 puntos de diferencia dejan bien claro la diferencia de potencial que hay entre los dos equipos.

Ataman maneja una plantilla interminable. 16 jugadores del primer nivel forman este curso el roster de un cuadro heleno interminable pese a la más que significativa ausencia del francés por lesión. Un pívot que fue reemplazado al día siguiente de romperse el peroné por Wenyen Gabriel.

Jugadores determinates y estrellas de la Euroliga. Algunos de la talla de Kendrick Nunn, quien pese a su discreto partido en el Palau es el segundo máximo anotador de la Euroliga con 20,4 puntos por partido por detrás tan solo de Vezenkov (20,5). 

Línea exterior de muchos kilates 

El killer estadounidense comanda una línea exterior que es pura dinamita y en la que militan también un sobrio Sloukas (7,8 puntos y 4,6 asistencias), el mago Lorenzo Brown (7,8 puntos y 3,2 asistencias) o Jerian Grant, MVP de la pasada Eurocup y que promedia este curso 8,9 puntos, 3,4 asistencias y un robo por duelo. 

Junto a ellos, escuderos de lujo como Osman, Mitoglou o Juancho Hernangómez. Equipazo. Todo un ogro que, además, llega herido tras ver quebrada su buena racha el pasado martes en el Palau. 

El Panathinaikos, el tercer mejor ataque de la competición con una media de 87 puntos por choque, vio rota su racha de cinco victorias consecutivas –Partizan, Virtus, Baskonia y Armani en el OAKA y Bayern a domicilio– y llega enrabietado en busca de regresar a la senda del éxito que le permita el asalto a un liderato que en estos momentos ocupa su eterno rival, el Olympiacos.

Los de Ataman han salido derrotados en cuatro de sus últimas cinco salidas -Barça (82-73), Efes (93-67), Partizan (91-73) y Zalgiris Kaunas (84-77)-

El Baskonia, con la presencia más que probable de Howard, intentará impedirlo. El cuadro vitoriano tratará de sacar provecho de la reciente debilidad de este Panathinaikos a domicilio.

Y es que los de Ataman han salido derrotados en cuatro de sus últimas cinco salidas, la ya citada del Barça (82-73), Efes (93-67), Partizan (91-73) y Zalgiris Kaunas (84-77) y tan solo han sido capaces de doblegar al Bayern lejos del amparo de su público en estos dos meses. Ese es el camino a seguir por un Baskonia que tiene ante sí la ocasión de confirmar la mejoría mostrada ante el Olympiacos. Reválida a lo grande.