Los dos gigantes del baloncesto griego van muy en serio esta temporada a por el título de la Euroliga. El Olympiacos, herido en su orgullo tras perder la final liguera ante el Panathinaikos y ver cómo su eterno rival alzaba también el título de campeón de la Euroliga en la primera temporada de Ergin Ataman en el banquillo, ha puesto toda la carne en el asador este mercado estival para construir una plantilla de ensueño con la que recuperar el trono europeo.
Eso sí, sus vecinos no se han quedado atrás y no sólo han mantenido el bloque que les dio el campeonato, sino que han ido un paso más allá aumentando su presupuesto y cerrando fichajes galácticos. Ambos están dispuestos a hacer todo lo que esté en su mano por evitar que el enemigo reine en el Viejo Continente y parten como los principales rivales a batir esta campaña en la pelea por el título de la Euroliga.
El Panathinaikos, tras 13 años sin participar en una final del máximo torneo continental desde que alzara el título de campeón en 2011 y tres temporadas consecutivas quedándose fuera del play off, afrontó en el verano de 2023 una profunda reconstrucción mediante una potente inversión de su dueño Dimitrios Giannakopoulos.
El cuadro de Atenas cambió su plantel prácticamente por completo con fichajes como Lessort, Papapetrou, Grant, Kostas Antetokounmpo, Juancho Hernangómez, Mitoglou y sobre todo a la leyenda del Olympiacos Kostas Sloukas, todos ellos comandados por el excéntrico técnico Ergin Ataman, fórmula arriesgada, pero que resultó en un éxito inmediato.
Mantener el bloque campeón ya era todo un logro para el conjunto verde, pero Giannakopoulos ha redoblado la apuesta con un astronómico presupuesto de 50 millones de euros –15 de ellos dedicados para la primera fase de la remodelación del OAKA– y no sólo ha conservado a sus estrellas, sino que ha mejorado la plantilla.
Jugadores secundarios que no terminaron de convencer como el exbaskonista Luca Vildoza y Aleksander Balcerowski han dejado el equipo y Juancho Hernangómez también podría seguir sus pasos en los próximos días si el club le abre la puerta. En su sustitución, se ha contratado a uno de los mejores bases de la Euroliga los últimos años como es el internacional español Lorenzo Brown y dos turcos con cartel NBA como el pívot Omer Yurtseven y en especial el alero Cedi Osman, recientemente fichado y sin duda una de las bombas del verano por quien suspiraba toda Europa y varias franquicias de la NBA.
El regreso de Vezenkov
Con estos movimientos y como vigente campeón del torneo, el Panathinaikos será el equipo a batir este curso, aunque el Olympiacos promete ponerle las cosas muy difíciles. A su imponente plantilla, que lleva tres participaciones consecutivas en la Final Four, le ha sumado pólvora especialmente en la cuerda exterior con los fichajes de Luca Vildoza, Keenan Evans y Tyler Dorsey, pero los dos movimientos con los que ha dado un golpe sobre la mesa son la contratación de Evan Fournier y el soñado regreso de Vezenkov.
Fournier regresa de su periplo en la NBA tras 12 temporadas y más de 700 encuentros en la mejor liga del mundo, mientras que Vezenkov también ha decidido abandonar Estados Unidos a cambio de un contratazo cercano a los 20 millones de euros por cinco temporadas y la oportunidad de alcanzar en El Pireo la gloria que tocó con la yema de los dedos en 2023, cuando se le escapó el título de la Euroliga con una canasta de Llull a tres segundos del final del partido. La batalla entre los gigantes griegos está servida y este verano han puesto el listón muy alto para el resto de equipos del máximo torneo continental.