El Baskonia busca este viernes su redención particular frente a la Virtus a partir de las 20.30 horas en Bolonia. La mejor ubicación posible antes de afrontar el 'play in' está en juego para dos rivales con el mismo balance y que tratan de finalizar la temporada regular con la flecha hacia arriba.

Ya no son necesarias las matemáticas ni ningún tipo de cábalas después de que el Anadolu Efes, uno de los equipos más en forma de Europa, impusiera la lógica en Estambul ante el Estrella Roja y sumara la victoria. Si el Baskonia quiere ser octavo y disponer de dos balas para alcanzar el 'Top 8', debe ganar por un punto en Bolonia.

De lograrlo, el cuadro alavés se vería las caras el martes que viene en Belgrado con el Maccabi por un puesto entre la aristocracia europea. Si perdiera frente a los israelís, aún contaría con el comodín del Buesa Arena ante el ganador del duelo entre el Efes y la Virtus en un partido que sería el viernes 19. En caso contrario, si sucumben en tierras transalpinas, los de Ivanovic ya son conscientes de que acabarán décimos y el camino hacia los cruces se complicará sobremanera.

No en vano, una derrota ante la Virtus se traduciría en un duelo con el Efes –también el martes 16– con el factor cancha en contra y si el Baskonia pierde en Turquía, dirá adiós a la Euroliga. El desafío es mayúsculo para el conjunto vitoriano, que demostró frente al Real Madrid su resiliencia para hacerse fuerte y sumar victorias en contextos poco favorables. 

Eso sí, el rival azulgrana necesita regresar a la senda de la victoria y el examen frente al Baskonia también es el escenario indicado para los italianos. Las seis derrotas consecutivas en Euroliga han echado por tierra la formidable primera vuelta completada por el equipo de Luca Banchi y la sensación es más bien agridulce en la coqueta localidad de Emilia-Romaña.

Anfitrión de capa caída

Y es que la Virtus Bolonia constituyó una de las serias revelaciones hasta el ecuador del curso, pero ha pagado muy caro en este tramo final su falta de frescura en su veterana plantilla, en algunos casos bien entrada en años. Ahora bien, Ivanovic alertó ayer en la previa del partido sobre las cualidades de un equipo que ya derrotó al Baskonia en la ida del pasado mes de diciembre por un claro 81-91.

En este sentido, Marco Belinelli y Toko Shengelia se postulan como las principales amenazas para un equipo que se verá obligado a trabajar a conciencia en el plano defensivo. Especialmente a la hora de detener la letal muñeca del tirador italiano y el incansable esfuerzo del georgiano en el poste bajo.

No hay dudas de que Belinelli y Shengelia son los principales anotadores de la Virtus Bolonia. Todo el juego ofensivo pasa por sus manos. El primero de ellos es el tercer jugador de la Euroliga que más triples promedia por encuentro (2,7), mientras que el exbaskonista es el décimo máximo anotador del campeonato con más puntos por partido (14,8). 

Una de las dudas orbitaba sobre la figura de Isaia Cordinier. El alero francés ha sido baja en las últimas cuatro jornadas y su ausencia ha hecho mella en las filas de Luca Banchi, pero ya está recuperado de una lesión de tobillo y reaparecerá este viernes ante los alaveses. En el enfrentamiento de la primera vuelta, Cordinier demostró su potencial atlético en el puesto de tres y lo cierto es que el Baskonia no llegó a encontrar la fórmula para detener sus cualidades sobre el parqué. 

La Virtus no sonríe en Euroliga desde el pasado 29 de febrero, cuando derrotó de manera cómoda al Valencia Basket. Sí que estuvo cerca de hacerlo en el reciente duelo frente al Panathinaikos, pero una canastas sobre la bocina de Nunn agravó todavía más la delicada dinámica de resultados del conjunto italiano. Por ello, el duelo frente al Baskonia supone mucho más que la lucha por la octava plaza.

Y es que la escuadra de Ivanovic, pese a sufrir desconexiones durante sus partidos, ha demostrado ser un digno equipo de play in por la Euroliga. El conjunto azulgrana, con Tadas Sedekerskis más que recuperado para la causa, es un equipo que sabe sufrir en contextos complicados y que también tiene una enorme capacidad anotadora.

Buena parte de la victoria frente a la Virtus pasa por encontrar al Markus Howard más volcánico y líder, pero también por sumar para la causa a escuderos de garantías. Algo que se echó de menos en Valencia, pero que Ivanovic sí que dispuso en la titánica victoria frente al Real Madrid.