REAL MADRID Núñez (21), Ndiaye (10), Garuba (6), Kostadinov (15), Vukcevic (16) -cinco inicial-, Klavzar (11), Aquino (-), Veesaar (10), Cebrián (7), Bartolomé (5), Santa Cruz (2) y González (6).

FUNDACIÓN 5+11 Cissoko (6), Sow (15), Birmingham (3), Diakhate (4), Faye (7) -cinco inicial-, Sigismonti (12), Macura (2), Lasarte (-), Ngom (11), Campos (3) y Pérez (2).

Parciales 32-13; 30-12; 28-22; 19-18.

Árbitros Baena, Marqueta y Cortés.

Pabellón Palacio de los Deportes de Granada.

Demasiado Real Madrid. Hay lecciones que difícilmente se olvidan en la vida y la de ayer puede ser de utilidad para los jóvenes cachorros del Baskonia que aspiran algún día a granjearse un nombre en esto del baloncesto. Seguro que ni en sus peores sueños imaginaban una inferioridad de este calibre ante un altanero adversario, poblado de jugadores que darán mucho que hablar durante los próximos años.

El conjunto blanco, lo más parecido a una apisonadora y vigente campeón de Europa en categoría júnior, se interpuso bruscamente en el sueño de las promesas azulgranas de reinar en el Campeonato de España. Frente a un todopoderoso oponente que cuenta entre sus filas con, por ejemplo, dos jugadores que han debutado esta pasada campaña en la ACB a las órdenes de Pablo Laso como Juan Núñez y Tristan Vukcevic o también acoge a un rostro muy conocido con Sediq Garuba -hermano del internacional Usman-, el combinado vitoriano no pudo plantear ningún tipo de oposición.

El duelo librado hace días por ambos en la primera fase había sido muy competido, de ahí que emergiera un rayo de esperanza antes del salto inicial. Sin embargo, no hubo color en una antesala de la final sin historia y tiranizada por Núñez (21 puntos y 4 asistencias).

El timonel merengue, sobrado de talento y descaro, se mostró especialmente dominante mientras estuvo en pista y movió a la perfección los hilos del Real Madrid, que difuminó las virtudes exhibidas por el Fundación 5+11 en los últimos partidos. Sin un buen balance defensivo y huérfanos de acierto, los pupilos de Miguel Ángel Hoyo se vieron desbordados en todas las facetas.

El filial azulgrana se dio de bruces contra la nítida superioridad de un Real Madrid que arrancó como un cohete y sentenció el encuentro en el cuarto inicial (32-13). A partir de ese instante, fue un constante quiero y no puedo por parte de un Baskonia que bajó los brazos excesivamente pronto. Percatado de que le tocaba subir una especie de Everest sin oxígeno, la formación alavesa vio cómo las desventajas aumentaban con el paso de los minutos sin que su rival levantara el pie del acelerador.

Se llegó al descanso con un 62-25 en contra del Fundación 5+11, muy tocado en la dirección por las ausencias de Joseba Querejeta y Alejandro López. Con el choque ya sentenciado, ambos técnicos concedieron la alternativa a los menos habituales ante lo que se avecina hoy mismo.

Y es que no hay tiempo para caer en lamentaciones. En el caso del Baskonia, está en juego (10.00 horas) la posibilidad de adjudicarse la tercera plaza y acabar el torneo con un gran sabor de boca. El Baskonia se medirá al Joventut, que perdió en la primera semifinal ante el Barcelona (64-80). Para desesperación de muchos, también hay clásicos en las finales de los torneos de categorías inferiores.

El conjunto vitoriano no puede venirse abajo, ya que hoy (10.00 horas) se mide al Joventut en la pelea por el tercer puesto