El coronavirus vuelve a poner en jaque el desarrollo normal de la Euroliga con el Fenerbahce esta vez en el punto de mira. El club turco ha sido el último en verse gravemente afectado por la emergencia sanitaria a contados días del comienzo de su apasionante cruce de cuartos de final ante el CSKA.

De momento, siete positivos entre sus filas detectados en las últimas 72 horas comprometen al máximo sus esperanzas de poder alcanzar la Final a Cuatro en el Lanxess Arena de Colonia, prevista a finales de mayo. Sin embargo, la principal incógnita a corto plazo reside en saber si la expedición otomana podrá viajar la próxima semana con destino a Moscú para disputar los dos primeros partidos de la eliminatoria, programados para el miércoles 21 y el viernes 23.

Lo más preocupante para Igor Kokoskov es que cinco de los positivos corresponden a jugadores. Los dos restantes son del masajista y fisioterapeuta. El entrenador serbio tampoco sabe a ciencia cierta si Jan Vesely, su bastión de la zona, podrá recuperarse a tiempo tras el fuerte esguince de tobillo sufrido en la penúltima jornada de la fase regular de la Euroliga ante el Barcelona.

Según confirmó el Fenerbahce, que protagonizó una brillante reacción en la segunda vuelta logrando 15 triunfos en 17 jornadas, todos los jugadores contagiados se encuentran aislados en sus respectivos domicilios y han empezado a recibir tratamiento. Dado el difícil momento por el que está pasando, su encuentro de ayer correspondiente a la liga turca ante el Efes fue aplazado sobre la bocina.