- Tras dos meses de parón, a los jugadores del Baskonia les ha llegado el momento del reinicio con el objetivo de, si sanitariamente es posible, finiquitar la temporada en la Liga ACB y la Euroliga dentro de unas cuantas semanas. La incertidumbre que rodea al futuro de las competiciones se mantiene por el momento -hasta finales de mayo ninguna de las dos organizaciones decidirá si sus torneos pueden reanudarse-, pero, mientras tanto, los equipos comienzan a reactivarse en medio de la incertidumbre que les rodea y las dudas que genera ese período de confinamiento en el que cada uno ha trabajado como buenamente ha podido en su domicilio. Hoy podrán disfrutar de las sensaciones del contacto con el balón y la canasta, aunque sea de momento en unos entrenamientos que nada tendrán que ver con los que acostumbraban a realizar antes. Y es que, el trabajo en esta primera fase será, como en todos los deportes, individualizado y con contacto alguno con el resto de los compañeros.
Para poder respetar el distanciamiento social que también se exige en el deporte, el Baskonia ha elegido su ciudad deportiva, ya sometida al preceptivo proceso de desinfección, para la vuelta a los entrenamientos. La pista principal se divide en otras tres -hay lonas verticales para separar los espacios-, con sus respectivas dos canastas en cada cancha. Por lo tanto, serán seis los jugadores que puedan ejercitarse al mismo tiempo en el recinto, cada uno de ellos acompañado por un preparador con el que tendrán que respetar en todo momento una distancia de cuatro metros.
A dicha medida hay que añadir todo el protocolo de higiene y seguridad que ya se ha convertido en el día a día de los jugadores. Llegadas escalonadas cada diez minutos para no coincidir con ningún compañero, obligación de utilizar el vehículo personal y acudir al entrenamiento ya con la ropa de trabajo desde el domicilio, espacios en el aparcamiento, obligación de protegerse con mascarilla y guantes, toma de temperatura a la llegada al recinto deportivo, lavado de manos, botellas de uso personalizado, uso de un solo balón por jugador que luego se debe desinfectar...
La vuelta al trabajo -se espera poder contar con el regreso de Zoran Dragic y Semaj Christon, ya sea hoy o en las próximas horas- servirá también para determinar el estado físico en el que se encuentran los jugadores que estaban lesionados de larga duración. La temporada estaba prácticamente finiquitada para Luca Vildoza, Jayson Granger y Patricio Garino antes de que se decretase el parón, pero ahora los tres podrían tener opciones de volver a jugar su las competiciones se reanudan y sus recuperaciones han ido por buen camino, con el problema añadido que el confinamiento ha supuesto en este sentido.