vitoria - Es de sobra conocido que el Armani Milán ha confiado este curso de manera casi absoluta el timón de su nave a un viejo conocido de la afición azulgrana. Mike James es el monopolizador del juego ofensivo italiano y de su mayor o menor acierto depende en gran medida el éxito transalpino. El Baskonia, por supuesto, sabía esta situación antes del inicio de la contienda de anoche pero, durante muchos minutos, fue incapaz de controlar a su antiguo jugador.

De esta manera, el estadounidense brilló por encima de todos y resultó absolutamente imparable hasta el descanso. De su mano el Armani llevó la iniciativa en el marcador con claridad durante los dos primeros cuartos y controló el ritmo de una contienda que parecía decantarse claramente de su lado. Nada menos que 17 puntos (con 2/2 en tiros de dos, 3/4 en triples y 4/4 en libres), tres rebotes, dos asistencias y un robo para un espectacular total de 21 de valoración reflejaba la estadística individual de James cuando enfiló el camino de los vestuarios.

Quedaba claro con estos datos que si el Baskonia no era capaz de contener la hemorragia causada por el americano no iba a disponer de opción alguna de quedarse con la victoria. Y ese debió ser el mensaje fundamental que trasladó Velimir Perasovic a sus discípulos en el intermedio, porque el escenario dio un vuelco inesperado.

De esta manera en el tercer periodo el base del conjunto transalpino permaneció inédito y, de hecho, no volvió a anotar hasta que únicamente restaban 3,25 para la conclusión del duelo para situar el provisional 68-66 en el marcador.

Siguiendo su costumbre habitual James no se amilanó y reclamó el protagonismo para sí pero quien realmente lo obtuvo fue Marcelinho Huertas. Mientras que el visitante falló dos de los tres tiros libres de que dispuso tras una falta de Vildoza y el triple con el que buscó evitar que el Baskonia recuperase el basketaverage en los segundos finales, el brasileño anotó los seis últimos y decisivos puntos (dos canastas y otros dos lanzamientos de personal) de los azulgranas y eclipsó la estrella del americano.