Tercer partido de la final de la ACB. Buesa Arena (18.30 horas; #0).
Árbitros: Martín Bertrán, Pérez Pérez y Cortés.
98-91
Janning
Causeur
Tavares
Shengelia
Vildoza
Campazzo
Poirier
Timma
Doncic
Thompkins
vitoria - Un nombre propio centra casi toda la atención antes de la tercera entrega de una final que entra ya en su fase decisiva y donde cualquier error puede resultar mortal de necesidad. El baskonismo cruza los dedos para que el tobillo derecho de Johannes Voigtmann, lastimado el viernes al término del primer cuarto tras un pisotón fortuito a Luka Doncic que dobló por completo su articulación, se haya restablecido y le permita ser de la partida hoy en un Buesa Arena a reventar con el fin de intentar llevar en volandas al Baskonia hacia el segundo triunfo y, por tanto, dejar a tiro de piedra la cuarta ACB de la historia.
Entre ostensibles gestos de dolor y una cojera indisimulable, el interior azulgrana se retiró en primera instancia a los vestuarios para ser sometido a una primera exploración médica que confirmó la existencia del esguince. Tras probarse en solitario en las entrañas del WiZink Center, quedó claro que su concurso sería inviable pese a tener todavía la zona caliente. Ya en frío, los dolores fueron a más y no se antoja sencillo que, si finalmente puede vestirse de corto, esté en su plenitud física y al nivel que requiere un compromiso de esta exigencia.
Voigtmann buscará una recuperación milagrosa que le permita alinearse ante el interminable ejército de Pablo Laso, pero las sensaciones no son del todo positivas. “Ahora mismo es duda. Vamos a ver si con el tratamiento que le están haciendo los fisios y el médico consigue recuperarse, pero ahora mismo es difícil, porque hay poco tiempo entre un partido y el otro. Obviamente el jugador hará todo lo posible, porque el enfrentamiento se merece hacer cualquier tipo de esfuerzo, siempre y cuando no peligre su salud a medio-largo plazo, que esto evidentemente no lo vamos a permitir. Si hay alguna posibilidad de jugar, lo hará. El premio por ganar este partido es grande”, recordó ayer Pedro Martínez nada más poner la expedición pie en el Buesa Arena tras un viaje de vuelta que se demoró lo suyo debido a un atasco en el puerto de Somosierra.
un jugador básico De lo que no hay duda es que la mala fortuna ha atacado a una pieza determinante en la primera victoria y uno de los contados jugadores que puede dar minutos de descanso a Toko Shengelia. Siempre en el punto de mira por su tibieza o no fajarse dentro de la pintura, el internacional alemán puede brindar grandes soluciones tácticas a Pedro Martínez a la hora de abrir el campo y sacar a Tavares de su zona de influencia.
Si el puesto de cuatro ya estaba cogido con alfileres dentro de la plantilla tras la negativa de Kevin Jones a renovar en vísperas del asalto a la Copa del Rey, la hipotética ausencia del alemán puede ser un drama ante las pocas garantías que ofrecen el recurso de Timma o el bisoño Malmanis, todavía muy verde para estas cruentas batallas. Se trata, además, de una demarcación en la que el Real Madrid está armado hasta los dientes gracias al incombustible Reyes o al pujante Thompkins, que han desplazado por completo del primer plano a un apático Randolph.
El Kirolbet, en el que jugadores como Beaubois, Shengelia o Timma deben dar un paso al frente, tratará de aprovechar el aliento de su público en una jornada donde el Buesa Arena podría registrar un lleno hasta la bandera. Según informó ayer el club, tan solo quedaban 275 entradas a la venta para un duelo ante los merengues que tiene visos de dejar las uñas en carne viva al personal.