VITORIA. El Laboral Kutxa vuelve a la competición liguera tras el paréntesis de la Copa del Rey del pasado fin de semana y recibe mañana en el Buesa Arena al Movistar Estudiantes con la sensible baja de Ioannis Bourousis.
Los vitorianos deberán afrontar el duelo ante los madrileños huérfanos de su referente y gran estrella de esta temporada como consecuencia de una pequeña rotura de fibras que se produjo en el duelo europeo del jueves ante el Zalgiris Kaunas.
Bourousis terminó el partido con molestias y las pruebas médicas han confirmado la rotura de fibras en el tercio proximal del recto anterior de su muslo derecho.
Ante esta inesperada y notable baja, el Baskonia se ha visto obligado a dar de alta a Darko Planinic que solo estaba habilitado para disputar la Euroliga después de completar la rehabilitación Davis Bertans.
El croata, de 2,11 metros, vuelve para formar pareja interior con Ilimane Diop en un Laboral Kutxa que también tiene la baja del lesionado Tornike Shengelia, que pasó por el quirófano para limpiar el menisco externo de su rodilla izquierda.
La ausencia del georgiano le descarta para lo que resta de temporada y obliga a Davis Bertans a forzar en su acelerado retorno a la competición tras diez meses lesionado y a actuar en la posición de ala-pívot.
Velimir Perasovic deberá aclarar el panorama para hacer que sus hombres no echen de menos a la determinante figura de Bourousis, que siempre emerge en los momentos de atasco colectivo y muestra los recursos necesarios para ejecutar la mejor acción.
El Baskonia deberá mostrar un mejor rendimiento que en el partido del jueves de la Euroliga ante el Zalgiris Kaunas, que pudo sacar adelante después de mucho sufrimiento y gracias a la brillantez en el cuarto final de Adams y Bourousis.
