Vitoria - Ibon Navarro ha tenido unos últimos días bastante ajetreados. Desde que Querejeta le comunicó oficialmente su intención de no colocarle como máximo responsable del Baskonia la próxima temporada, por su mente no pasó ni un instante la posibilidad de dar su conformidad a la propuesta de tres campañas trasladada por el club para que ejerciera como ayudante. De hecho, la semana pasada viajó a Madrid para reunirse con su agente (José Luis Ortiz) y explorar las diferentes opciones de mercado con el fin de seguir en la élite de los banquillos.
“Cuando el club me comunica que no voy a continuar de primer entrenador, la primera decisión que debo tomar es meditar qué quiero hacer y ver si puedo tener alguna posibilidad de entrenar en algún equipo en España y el extranjero, o aceptar el rol de ser ayudante para lo que estaba la oferta del Baskonia por encima de otras. Era una decisión crucial para el resto de mi carrera. Después de hablarlo con mi familia y mis agentes, di el paso de no ser segundo, al menos, el próximo año y tratar de ser entrenador jefe”, fue su cronología de los hechos al saber que las puertas del equipo vitoriano estaban cerradas a cal y canto.
Cuestionado sobre si el Murcia será su nuevo destino, algo que podría hacerse oficial cuando concluya la final liguera entre Real Madrid y Barcelona, el vitoriano jugó al despiste. “Todavía no ha acabado la liga y los equipos están en un impasse. No se han movido las cosas, pero no va a haber muchos banquillos que cambien de entrenador. Ahora mismo, siendo novato toca esperar a ver lo que hay. De aquí a 15-20 días, espero tener algo. No me cierro las puertas del extranjero, ya di en su día el paso de marcharme fuera. Donde quieran, me iré”, reconoció. - O.S.M.