- No hacía falta que lo dijera públicamente porque ya lo ha demostrado con hechos durante las más de dos décadas que lleva dirigiendo los designios del Baskonia, pero por si existía alguna duda para Josean Querejeta “ningún jugador es imprescindible ni definitivo” en el conjunto del Buesa Arena. Así lo acaba de asegurar el máximo dirigente azulgrana en una entrevista concedida al programa Play Basket de la Cadena Ser, en la que trató de justificar la pérdida de identidad experimentada por el club vitoriano en los últimos años con el adiós de iconos rutilantes y la ausencia de recambios de prestigio y calidad que hayan mitigado su alargada sombra.
“Cada vez nos va a costar más mantener a los jugadores emblemáticos. Únicamente lo pueden hacer aquellos equipos como el Real Madrid y el Barcelona que tienen una economía superior al resto. Ellos sí pueden retener a las estrellas, pero para los demás resulta muy difícil. Cuando uno destaca, siempre quiere estar en uno de los mejores clubes de Europa o busca una salida fácil a la NBA”, precisó el presidente del Laboral Kutxa, especializado en las ventas millonarias durante los mercados estivales pero huérfano ya de la exitosa pócima que permitió al combinado alavés poblar sus vitrinas de prestigiosos títulos.
Para sobrevivir en la elite y competir con los grandes transatlánticos continentales, en las oficinas de Zurbano reina la convicción de que deberán seguir produciéndose en el futuro este tipo de operaciones que ayudan al Baskonia a regenerarse y dan algo de oxígeno a sus debilitadas arcas en un contexto de crisis como el actual. El último ejemplo de la naturaleza vendedora azulgrana tuvo a Thomas Heurtel como protagonista con su traspaso al Anadolu Efes en vísperas del comienzo del Top 16.
Querejeta reconoció que “era muy difícil retenerle” ya que “manejaba unas cifras imposibles para nosotros” y había mostrado una escasa predisposición para ampliar un vínculo que expiraba este verano. “Surgió la posibilidad de hacer una venta e ingresar dinero y ante la imposibilidad de que continuara con nosotros accedimos a su marcha. Era un jugador importante, pero por circunstancias el equipo está funcionando ahora mejor que anteriormente”, puntualizó.
A la hora de configurar un proyecto competitivo, a su juicio, su principal preocupación se dirige hacia la figura del banquillo. Precisa de un técnico que le inspire la máxima confianza, controle los egos del vestuario y tenga una sintonía y una comunicación fluídas. El flechazo y el longevo matrimonio con Dusko Ivanovic parece, eso sí, irrepetible en el futuro con algún otro entrenador, al que exige buenas dosis de liderazgo y una fuerte personalidad para extraer hasta el último jugo de cada jugador. “Lo más importante en un equipo es que esté liderado por alguien con las ideas muy claras y eso está por encima de cualquier jugador por importante que sea”, razonó Querejeta.
Cuestionado en este sentido el presidente baskonista por Ibon Navarro y su posible continuidad en el Buesa Arena más allá de la actual temporada, volvió a dar largas y escurrió el bulto como ya ha sucedido en otras ocasiones en los últimos meses. “Nos tenemos que centrar en lo que viene por delante. Se avecinan semanas complicadas y nada puede desviar la atención. Estamos contentos con él y está haciendo un buen trabajo, pero ya habrá tiempo para tomar decisiones más adelante. Ojalá sea el Xavi Pascual del Barcelona. Cuando es de la casa, la identificación siempre va a ser mayor”, reveló el presidente sin querer en ningún instante comprometerse a algo a la espera de cómo finaliza la temporada. De Fernando San Emeterio, “el emblema” del equipo según su opinión y cuyo futuro también es incierto, tampoco soltó excesiva prenda. “Está haciendo una gran temporada y esperamos que vuelva este verano a la selección. Acaba con nosotros en junio, pero no es el momento de hablar ni de contratos ni de futuro”, zanjó rápidamente y sin ganas de explayarse.
Obviamente serán los resultados quienes determinen el tiempo que el preparador vitoriano permanecerá al frente del Baskonia, cuyo grado de competitividad en estos últimos meses se encuentra fuera de toda duda tras un decepcionante comienzo de ejercicio que hizo saltar las alarmas. En este sentido, Querejeta hizo autocrítica al admitir que “tuvimos que corregir sobre la marcha los errores importantes cometidos en verano”.
Tras los drásticos cambios tanto en el banquillo como en la plantilla, el cuadro alavés ha subido muchos enteros su cotización, se ha convertido en una apisonadora en el Buesa Arena y mantiene una progresión imparable gracias a la puesta en práctica de un baloncesto atractivo, dinámico y, en algún momento, pasado de revoluciones. “El equipo está en una buena disposición y con posibilidades de acceder al Top 8 y continuar creciendo en la ACB. Hay que ser precavidos porque, cuando estás en dos competiciones tan exigentes, siempre tienes dificultades para ganar”, recordó.
En un momento donde su política de fichajes se halla más cuestionada que nunca y se le apunta con el dedo como el principal culpable de la deriva azulgrana, Querejeta quiso responder a sus voces más críticas. Y lo hizo con los argumentos de siempre que se encarga de repetir hasta la saciedad. “Siempre hemos competido al más alto nivel con menos presupuesto. Cuando estás en inferioridad económica, acertar todas las veces es imposible. El que tiene mucho dinero se puede equivocar uno o dos años, pero lo lógico es que sus posibilidades de acierto sean mayores que las del resto viendo además cómo está el mercado”, rebatió el dirigente de Lazkao, quien tiene ya completamente superada la enorme decepción que supuso la ausencia del Laboral Kutxa en la Copa del Rey del Gran Canaria Arena.
Tras casi dos décadas de presencia ininterrumpida en el torneo, el conjunto vitoriano purgó los pecados de una deficiente planificación. Sin embargo, como bien deslizó su cabeza visible, es algo que “no me ha quitado el sueño y que les ha pasado a todos”. Para refrendar su opinión, lanzó un dardo al Real Madrid. “Un equipo tan grande como él no ha estado siempre en la Euroliga y algún año se le ha repescado. Lo importante es que una trayectoria regular durante muchos años te permita estar al más alto nivel. Eso siempre debe prevalecer por encima de que un año estés mejor o peor”, concluyó tajante.