Vitoria - Desgraciadamente para todos, lo sucedido en la matinal de ayer en Murcia es una película de sobra conocida por los aficionados baskonistas en la presente temporada. A base de repetirse una y otra vez, se ha convertido en una tortura para los fieles seguidores azulgranas. Probablemente también para Sergio Scariolo, que volvió a recurrir a la conclusión de la contienda a su discurso habitual cuando el equipo muestra su cara más desangelada. De esta manera, el técnico aludió de nuevo a la falta de intensidad y de experiencia de sus discípulos aunque, eso sí, una vez más tampoco fue capaz de aportar la más mínima clave sobre los motivos de las mismas o alguna posible solución. Así, se limitó a alabar los méritos de un adversario -sensiblemente inferior y mermado por la baja de uno de sus jugadores de referencia- al que consideró justo vencedor y felicitó por jugar "mejor".
Por lo que respecta al análisis de la comparecencia vitoriana, Scariolo volvió a tirar de repertorio para señalar que "tuvimos un impacto inicial en el partido muy blando y nuestra capacidad de reacción estuvo relacionada directamente con nuestra defensa. Cuando fuimos capaces de defender duro nos acercamos pero cuando dejamos de hacerlo ellos volvieron a escaparse", resumió.
Cuestionado por el hecho de que el Baskonia este protagonizando de manera continuada fiascos como el de ayer, el preparador de Brescia no fue capaz de encontrar una explicación demasiado convincente. "Estábamos avisados de lo que podía pasar. Sabíamos que el Murcia es un conjunto fuerte en lo ofensivo que podía hacernos daño si no estábamos intensos pero no lo hemos he cho. No por estar avisados la maduración y la concentración crecen automáticamente. Debería ser así pero parece que necesitamos más tiempo y más esfuerzo individual y colectivo para concentrarnos. Nos falta fortaleza mental para dar continuidad a nuestro esfuerzo", lamentó.