Scariolo explota contra el arbitraje y exige respeto

vitoria. Tronó ayer por sorpresa la plácida sala de prensa del Buesa Arena, que asistió estupefacta a la explosión dialéctica de Sergio Scariolo, cuyo tradicional verbo y seny en cada una de sus comparencias públicas saltó por los aires tras el partido ante el UCAM Murcia. Minutos después de ser expulsado y contemplar el desenlace final del partido desde la bocana de vestuarios, desplegó el italiano durante dos minutos un inusual discurso que contuvo tantas dosis de crítica como de reivindicación a cuenta del colectivo arbitral. Acompañado del segundo de a bordo, el vitoriano Ibon Navarro, el de Brescia cargó sin miramientos contra los tres colegiados, a los que exigió el mismo "respeto" que al resto de equipos de la ACB, con independencia de su presupuesto. "Ya que hoy no he podido ver terminar el partido, sólo quiero hacer una consideración", advirtió. "Sinceramente, y quiero dejarlo muy claro, no estamos dispuestos a que haya ningún agravio comparativo en ningún sentido hacia mi equipo y mi club", atronó a las primeras de cambio. Aunque la marejada venía de fondo, el arbitraje que ayer sufrió Tibor Pleiss fue la gota que colmó el vaso de un encendido Scariolo que ayer terminó por explotar. "Durante ya mucho tiempo la diferencia de trato con Pleiss y otros jugadores ha sido evidente y siempre me he callado... pero ya no estoy dispuesto a aguantar más; queremos y pretendemos respeto y que las mismas situaciones se administren igual para todos los equipos. Que nadie piense que por tener cierta austeridad o cierta consideración económica conlleven una bajada de ambición o de deseo, porque no es así".