Vitoria. Acudía ayer el Baskonia casi en precario a un encuentro de urgencias, que finalmente saldó sin mayores problemas. Ayudó, y mucho, un endeble Estudiantes que en ningún momento optó por competir y que permite al Laboral Kutxa sumar su primer triunfo en ACB después de las derrotas ante Gran Canaria y Real Madrid. Mermado por la enfermería pero aliviado en parte con la presencia Maininoldi y Kaukenas, que apenas entrenaron pero que aportan al plantel una configuración más seria, el Baskonia hizo pagar los platos rotos de su presión a la escuadra colegial a base de ritmo de partido, una buena defensa que por momentos se relajó y, sobre todo, la buena respuesta de jugadores novatos como Diop o Causeur, a los que Scariolo también añadió a Mainoldi y Kaukenas, "que nos han permitido alargar las rotaciones y dar un respido a gente como Nocioni", advirtió el técnico en rueda de prensa.
Considerando las complejas circunstancias que rodearon al equipo tras su farragoso viaje desde Chipre -el plantel recaló en Vitoria el sábado casi de madrugada- , Scariolo mostró su satisfacción por un duelo donde "han predominado las luces a las sombras", a pesar de los altibajos propios de un marcador tan abultado y las "ingenuidades" propias de un conjunto plagado de jóvenes jugadores. "Sería una contradicción que no las tengamos con un equipo tan joven. Pero si conseguimos mantener la concentración mas alta, ser más sólidos y no sufrir tantas descompensaciones, estoy seguro que esos picos bajos se irán suavizando", concluyó el italiano.
Vidorreta Por su parte, el técnico visitante, Txus Vidorreta, no puso ningún paliativo a la derrota, que consideró justa. "Sabíamos que por sus problemas físios teníamos una oportunidad, pero han sido muy superiores desde el inicio y no ha habido nada que hacer", señaló.