vitoria. Hubo y habrá otras ocasiones más propicias para que dos nobles del baloncesto ACB se vean las caras con algo de verdad en juego, pero el duelo que acogerá este mediodía el Martín Carpena de Málaga reunirá a dos contendientes con la mente puesta en metas bien distintas. El Caja Laboral visita a un Unicaja que esta semana ha dicho ya adiós a sus opciones de seguir vivo en la Euroliga con la vista fija en el trascendental duelo del próximo jueves ante el Montepaschi. Los andaluces, aún malviviendo en la competición doméstica, afrontan la cita de hoy con la obligación de sumar un triunfo que les permita consolidar sus opciones de disputar el próximo play off por el título. Tratarán de aprovechar la previsible relajación de un Caja Laboral que, esta vez sí, parecería justificada y hasta casi justificable, por mucho que Zan Tabak se esmere en tratar de mantener el nivel de tensión en un grupo al que desconectar no le resulta difícil.

El preparador croata tratará de extender las rotaciones, como hizo la pasada semana en el derbi ante el Lagun Aro, para desgastar lo menos posible las piezas. Con jugadores de la talla de Andrés Nocioni tocados tras el duelo de Moscú -el argentino acabó el partido con un tobillo dañado y vendado-, Tabak concederá más minutos sin duda a piezas que en otros encuentros de mayor voltaje asumen un rol más secundario, como Jelinek, Pleiss o incluso Causeur, con el fin de preservar frescos a los hombres que el jueves deberán cargar con el peso del equipo ante el Montepaschi.

El Unicaja de Repesa está firmando una temporada más que decepcionante en la ACB, pero en las últimas semanas parece haber enderezado el rumbo. Al igual que en la Euroliga, donde ha sido capaz de firmar victorias de gran valor ante oponentes de postín, ha encontrado el equilibrio en el torneo doméstico donde, salvando la derrota de la pasada semana en la cancha del UCAM Murcia, encadena cuatro victorias en sus últimos cinco compromisos.

Repesa recupera para la cita a todos sus efectivos. Earl Calloway y Kruno Simon, que arrastraban diversos problemas, podrán jugar para añadir aún más dificultad a una cita en la que el Caja Laboral puede descolgarse con una de esas actuaciones sobresalientes tan típicas en los buenos equipos cuando juegan sin presión. Lo importante, en todo caso, llegará el jueves. Y eso lo tienen todos muy claro.