VITORIA. La inesperada lesión de Maciej Lampe se ha convertido en un importante contratiempo para el Caja Laboral que le está obligando a redoblar sus esfuerzos para poder cerrar una plantilla competitiva para la próxima temporada. Si antes de conocer la baja del poste polaco el Baskonia ya peinaba a fondo el mercado buscando un cinco que completara el plantel de Dusko Ivanovic, ahora se ha visto obligado a redoblar sus esfuerzos.

Y es que las circunstancias provocan que ahora sean dos los jugadores interiores de primer nivel los que necesita sacarse de la manga Josean Querejeta. Pues bien, en esta complicada tesitura, el presidente de la entidad de Zurbano ha decidido volver a explorar una vía ya conocida.

De esta manera, ha vuelto a saltar a la palestra el nombre de Miroslav Raduljica. El joven y prometedor pívot serbio lleva siendo objeto de deseo del Baskonia desde hace dos años pero, hasta ahora, diferentes circunstancias han impedido que pueda deleitar a la afición del Buesa Arena con su juego.

Ante la necesidad de reforzar su pintura y la escasez de candidatos apetecibles, el conjunto vitoriano ha realizado en los últimos días un nuevo intento por hacerse con sus servicios. Raduljica pertenece al Efes pero, en principio, el cuadro turco no cuenta con él para el próximo ejercicio puesto que cuenta con una nómina de pívots estelar en la que destacan, por ejemplo, Nikola Pekovic o el exbaskonista Stanko Barac. Sin embargo, la entidad cervecera no desea prescindir de él sino conservarlo como una opción de futuro. Para ello, ha trabajado en conseguir una cesión a otro equipo de calidad. En principio, el elegido era el Partizan pero la operación no termina de cerrarse y es ahí donde el Baskonia ha entrado en escena con fuerza para tratar de hacerse con Raduljica.