Vitoria. Llegó cuando nadie le esperaba, con un contrato de un mes bajo el brazo y esa vitola de temporero que tanto gusta en el Baskonia. Ahora, a falta de dos semanas para que expire su vinculación con el conjunto vitoriano -el 13 de octubre, concretamente- Florent Pietrus es consciente de lo complicado que va a ser para él prolongar su estancia en el Buesa Arena más allá de esa fecha. "El club no me ha vuelto a decir nada sobre mi situación así que, de momento, tengo contrato aquí hasta el 13 de octubre. En este tiempo espero mejorar y demostrar que puedo jugar en este equipo. Tampoco me presiono. Lo importante es sentirme bien en la pista y ayudar a mis compañeros. Tengo dos semanas para trabajar y lo que pase pasará, porque el deporte es así", explicó ayer con resignación el jugador francés tras la sesión de trabajo matutina celebrada en las instalaciones del BAKH. Eso sí, en caso de que, como todo apunta, deba abandonar la disciplina baskonista a corto plazo, Pietrus asegura que se irá "con la cabeza bien alta", satisfecho por haber dado "el cien por cien" en una aventura que, para él, está siendo "un sueño".
"El Baskonia es un club muy diferente a todos los demás, con una gran estructura. Tiene un gran entrenador y por eso también gana títulos. Llegar aquí es como un sueño para mí, pero el verdadero sueño es quedarme y jugar en este equipo", subrayó ayer con su característica y tenue voz el antiguo jugador del Power Electronics Valencia.
Pau Ribas Por su parte, mientras su compañero no puede evitar tener su cabeza en su futuro al mismo tiempo que en el ya inminente debut liguero, Pau Ribas puede permitirse el lujo de estar totalmente centrado en el encuentro del próximo domingo ante el Meridiano Alicante. Con una larga semana por delante para prepararlo, el jugador catalán confía en que la escuadra azulgrana ultime durante estos días su puesta a punto para la competición. "Tenemos una semana para preparar bien el partido, ponernos las pilas y apretar el acelerador", advirtió ayer el timonel.
"Empezamos en casa, sin presión y con más confianza, y espero que eso nos sirva como un plus. El Alicante es un rival que en principio se nos tendría que dar bien si somos capaces de jugar a un muy buen ritmo", destacó Ribas antes de adelantar que, en su opinión, "los cuatro equipos" que disputaron la Supercopa serán los principales rivales con los que el Caja Laboral peleará por el título de la ACB.